Procesado y con prisión terminó el uruguayo que confesó haber premeditadamente iniciado un fuego en las cercanías del Parque Lecocq, con claras intenciones de provocar un incendio de proporciones cosa que finalmente ocurrió, aunque luego dijo que lo había hecho «para ahuyentar a los mosquitos».

Este piromaníaco confeso ya tenía antecedentes penales y la policía logró detener también a dos adolescentes que incendiaron un campo en Santiago Vázquez.

En el último fin de semana, el Departamento de Bomberos de Montevideo tuvo que acudir a varias decenas de llamados por principios de incendio.

La sequía que afecta a gran parte del territorio nacional sumado a las altas temperaturas de la época son la conjunción más peligrosa para la aparición de fuegos.

Cabe recordar que desde el pasado 1º de diciembre está vigente el Edicto del Fuego que limita severamente y pena legalmente a quienes violen los dictámenes oficiales.