Los bomberos combatían este sábado 10 de enero de 2009 varios  focos en las cercanías de Pirlápolis, el segundo  centro turístico del país, en el marco de una ola de incendios forestales que  alcanza frecuencias y extensiones inusitadas en lo que va del verano.

 

La Dirección de Bomberos ordenó en la jornada una evacuación preventiva en  las zonas de Cerro del Toro y Playa Verde, próximas a Piriápolis, donde  veranean actualmente más de 20.000 personas, la mayoría turistas argentinos y  brasileños, expresó la Asociación de Turismo del lugar, informó la agencia AFP.

 

En Piriápolis y alrededores, el fuego lleva consumidas en la jornada más de  10 hectáreas, mientras que en los balnearios de Pinamar y Salinas, distantes 35  km de la capital, arrasó 250 hectáreas de bosques.

 

«Ambos siniestros permanecen sin control y trabajan en procura de su  extinción varios destacamentos de bomberos, una decena de máquinas de la  intendencia, cuatro helicópteros de la Fuerza Aérea, personal del Ejército y de  la Policía, éste último colaborando con las tareas de evacuación», indicó a la  AFP el portavoz de bomberos, Carlos Nicola.

 

La Dirección Nacional de Bomberos registra en lo que va del año por encima  del centenar de intervenciones diarias, período en el que fueron devastadas  casi 8.000 hectáreas, más del doble de las últimas temporadas estivales, en una  situación que se ve agravada por la severa sequía que afecta al país.