El Proyecto de Ley que pretende legalizar tres máquinas tragamonedas en bares y espacios sociales, dejaría a los niños y jóvenes de nuestro país expuestos a patologías graves de ludopatía, además de un considerable aumento de ludópatas.

Estas consideraciones fueron destacadas por los expertos internacionales Susana Jiménez Murcia y Henrique Lópes en la I Jornada Científica sobre el juego patológico y otras adicciones, realizado esta semana en Uruguay, que contó con el apoyo de la Sociedad Uruguaya de Psiquiatría y de la Fundación Niños con Alas.

Susana Jiménez Murcia, profesional española en materia de adicciones de juego y Directora de la Unidad de Juego del Hospital Universitario de Bellvitge de Barcelona, recomendó a las autoridades uruguayas y a los partidos políticos uruguayos intervenir cuanto antes en la puesta en marcha de este proyecto de ley, asegurando que en la experiencia española, donde las máquinas traga monedas fueron legalizadas en todos los bares;

“Muchas personas entraron en contacto con ese juego que representa un potencial adictivo, creciendo considerablemente el número de ludópatas. Parece un juego totalmente inocente. De hecho, muchos te dicen que empezaron jugando tirando el cambio del café, y después ya iba con amigos a la salida del trabajo, porque cada tanto les daba algún premio. Hasta han reconocido que les ha servido para “desconectarse” de todos su problemas», informó.

Por su parte Henrique Lópes reveló que la problemática aumentó a nivel exponencial en todo el mundo, y que Uruguay no es ajeno al contexto global.

El actual Presidente de la Comisión Nacional de Calidad en Salud de Portugal señaló que en los 50 países que cuentan con evaluaciones de adicción al juego las tasas son “preocupantes”, realidad calificada por la comunidad científica como una “epidemia”.

¨Tener en bares o almacenes este tipo de maquinas tragamonedas sería nefasto para niños y adolescentes, los cuales con las nuevas tecnologías y el acceso a Internet ya califican como potenciales ludópatas.

Las personas que presentan algún tipo de “fragilidad” son más propensas a caer en este tipo de adicción. Así pues, los jóvenes entre 18 y 23 años, las poblaciones reclusas, aquellos que ya poseen algún tipo de adicción y quienes han sufrido algún shock emocional, son los grupos de riesgo que deben atenderse en etapa temprana¨, indicó Lópes.

En ese sentido, el psiquiatra Oscar Coll, encargado del Programa de Prevención y Tratamiento del Juego Patológico (centro de Atención a Ludópatas que funciona en el Hospital de Clínicas), alertó sobre la situación en Uruguay. Coll subrayó el impacto que tiene la ludopatía en el futuro de la sociedad uruguaya y alertó que la prevalencia de ludópatas puede llegar al 5% de la población si no se toman medidas de contención. “Fuimos muy ingenuos, no nos dimos cuenta y se nos vino el problema arriba, pero creo que todavía estamos a tiempo para evitarlo”, reflexionó el profesional.

Por su parte, El Doctor en Derecho y Ciencias Sociales, Miguel Manzi, propulsor de la coalición de blancos y colorados para competirle al Frente Amplio en las elecciones municipales de Montevideo, aseguró que ¨Todos los actores sociales y políticos, debemos prestar atención a estos datos y buscar en conjunto una solución.

El Gobierno del Presidente Mujica, a través del Ministerio de Economía, comete un grave error en promover esta ley donde se permite que en cada esquina nuestros niños y jóvenes tengan tragas monedas a mano y legalizadas.

Manzi, quien es visto por algunos sectores políticos, como posible candidato del Partido Colorado a la Intendencia de Montevideo bajo el nuevo lema de coalición, aseguró que según la evidencia presentada ¨Los más expuestos a las ludopatías son los grupos más vulnerables. Menores y personas de bajos recursos, ellos son los que pierden. Y que gana? Nadie, como lo reconoce el Gobierno en su proyecto, cuyo fundamento es absurdo.

Como no fue capaz de controlar el crecimiento de las máquinas informales, ahora propone controlar las condiciones de explotación.

Lo peor es que descarga ese control sobre las intendencias, que deberán hacer el trabajo que no pudo el Gobierno. Absolutamente Insostenible¨, concluyó.