Queremos hacer llegar un apretado abrazo en estos momentos de dolor a todos los trabajadores del taxímetro y del transporte en general, así como a la familia del trabajador fallecido, pues han sufrido una pérdida irreparable.

Este nuevo hecho de violencia, que enluta a toda la clase trabajadora, está enmarcado en una problemática social muy profunda, signada por las penosas condiciones de vida de decenas de miles de uruguayos excluidos de un trabajo digno, una vivienda decorosa, un sistema de calidad para la atención a la salud y una educación pública integral.

Reafirmamos que el deterioro del tejido social no se recompone con la aplicación de los planteos reaccionarios de mano dura, militares patrullando las calles y encarcelamiento masivo. No es aumentando las penas y estigmatizando la pobreza cómo se disminuirán los hechos de estas características. Lo que hay que modificar son las políticas económicas que condenan a miles de hombres y mujeres de todas las edades, pero especialmente a niños y jóvenes, a la marginación.

Esta dura realidad no será cambiada mientras un 0,5% de la población sea la propietaria del 94% de las tierras del país; mientras el presupuesto de los Ministerios de Defensa e Interior tripliquen al de la vivienda, dupliquen al de la salud y casi igualen al de la educación; mientras más de 700.000 ocupados perciban remuneraciones líquidas por debajo de los $ 14.000 mensuales.

Reafirmamos nuestro apoyo a las medidas que exige el SUATT hasta que las soluciones de fondo no lleguen: uso de la mampara, implementación de nuevos mecanismos de seguridad y mayor regulación en el sector.

Contra la violencia

Solidaridad con los trabajadores del taxímetro

Por soluciones profundas: trabajo digno, salud, educación y vivienda

ADES Montevideo / FENAPES / PIT-CNT