Compartimos la carte remita por el sindicato FENAPES a los legisladores que alude a la discusión del Presupuesto Nacional.

Montevideo, setiembre de 2010.

Sres. Legisladores:

Comienza por estos días la discusión parlamentaria del Presupuesto. No es necesario insistir en la enorme responsabilidad que esto implica para cada uno de Uds.: de lo que argumente y vote cada diputado y senador dependen los servicios públicos que recibamos durante un quinquenio todos y cada uno de los uruguayos. Auguramos a Uds. un fértil período de trabajo, y les proponemos, con nuestro PIT – CNT, que el norte de la elaboración presupuestal sea convertir al Estado en una herramienta privilegiada para la construcción de un país productivo con justicia social.

Se ha anunciado por parte del Poder Ejecutivo que no se enviará Mensaje Complementario alguno. Lo deploramos, más allá de cuestiones presupuestales concretas, porque desconoce el principio de separación de poderes y el sentido común. Es un acto de ceguera y soberbia: si un legislador constata un error en la redacción, una omisión, una incongruencia en el Proyecto de Ley, tiene el deber de manifestarlo y pedir que se enmiende. De lo anterior se sigue que el Poder Ejecutivo debería corregir esos errores, por una mera cuestión de responsabilidad. A no ser que se acepte el dogma de la infalibilidad presidencial.

Respecto al presupuesto para la educación pública, tendrán Uds. ante sí dos mensajes presupuestales: el del Poder Ejecutivo  y el del CODICEN. Les pedimos leerlos con el mayor cuidado. Constatarán que votar el mensaje del CODICEN de la ANEP implica votar recursos para construir más escuelas, escuelas técnicas de UTU y liceos. También para refaccionar o sustituir locales vetustos e inadecuados. Asimismo, votar el mensaje del CODICEN es financiar la creación de más cargos de psicólogos, asistentes sociales, adscriptos, funcionarios administrativos y de servicio, etc. Lo que implicará directamente una mejor atención de todos nuestros educandos, casi todos ellos niños y adolescentes.

Si se aduce que es mucho dinero, respondemos que sólo se puede llegar a esa conclusión partiendo de un criterio de elaboración presupuestal profundamente erróneo: primero vemos cuánto les debemos a los de afuera y el sobrante lo repartimos entre todas nuestras necesidades, con lo que terminamos no satisfaciendo ninguna y agravándolas todas. Debe quedar claro que si se retacea las inversiones en educación, se fomenta la ignorancia. “Sean los orientales tan ilustrados como valientes”, dijo nuestro Primer Jefe. Queremos ir por esa senda y contar con su compañía.

Quedando a su disposición para cualquier consulta,

saluda atte.

Mesa Ejecutiva de FENAPES