El recientemente designado embajador uruguayo en Venezuela, Oscar Ramos Fernández consideró que no deberíamos ver a dicho país “como una suerte de Papá Noel dispensador de regalos con mano amplia, sino como un país amigo, cosa que ha demostrado constituyéndose en un generoso apoyo para iniciativas económicas y sociales, importante per se y con intereses políticos y comerciales a ser entendidos y atendidos”.

Los dichos de Ramos en la Comisión de Asuntos Internacionales el jueves 16 de diciembre motivaron algunas puntualizaciones de parte de los legisladores opositores, Ope Pasquet del Partido Colorado y Luis Alberto Heber del Partido Nacional.

“Al final ya de su exposición caracterizó a Venezuela como un Estado amigo del Uruguay, con intereses políticos y económicos a ser entendidos y atendidos, si recuerdo bien. Entonces, quisiera preguntarle cuáles son los intereses políticos de Venezuela que nosotros tenemos que atender”, sostuvo Pasquet.

Por su parte, Heber dejó constancia que “no veo conexiones de carácter político y menos aún a Venezuela como un gran Papá Noel que hace el bien y lucha contra el mal en la región. Insisto en que no deseo generar una polémica con el señor Embajador, sino simplemente no quiero dejar pasar una afirmación que realmente no representa,  por lo menos, mi opinión y la que mi partido tiene del Gobierno de Venezuela, que lejos está de ser una figura como la de Papá Noel”.

Ramos precisó que se refería “al apoyo que nos ha dado Venezuela en algunos proyectos como los ya detallados, a saber: a las empresas gestionadas por sus obreros, al Hospital de Clínicas, etcétera. Evidentemente -esto es una valoración personal- eso significa que ha existido, de parte de Venezuela, un apoyo permanente a determinadas iniciativas”.

Por eso, “no queremos ver a Venezuela como a un Papá Noel dadivoso, sino que simplemente queremos establecer con ese país las relaciones que correspondan y en los parámetros adecuados. En este sentido, me remito al principio de mi exposición, cuando decía que soy un funcionario designado por el Presidente de la República, que reporta a nuestra Cancillería, de donde vendrán las directrices políticas que enfatizarán o no ciertos aspectos de todo esto. Lo que estoy haciendo, con esta afirmación que efectué, es un reconocimiento de hechos que son de pública notoriedad”.

“Actitud benevolente”

El presidente del grupo parlamentario, Alberto Couriel (Frente Amplio) salió en defensa del diplomático, quien proviene desde el sector privado.

“Quisiera restablecer el sentido de las palabras pronunciadas por el Embajador. Él ha dicho que Venezuela ha tenido una actitud muy benevolente con Uruguay. Cuando el doctor Tabaré Vázquez asumió como Presidente, al primero o segundo día la cooperativa COFAC enfrentó una situación difícil. En esa ocasión, Venezuela tuvo un gesto para que el inicio del Gobierno del Frente Amplio no tuviese la dificultad de una crisis financiera, nada más ni nada menos después de los acontecimientos del año 2002”, recordó.

Por tanto, “eso fue una ayuda extremadamente importante. A esto debemos agregar donaciones como la del Hospital de Clínicas y la del Instituto de Cáncer. A su vez, en Uruguay cuando una empresa se caía y los trabajadores intentaban recuperarla y ponerla en funcionamiento, siempre tenían problemas de financiamiento. Venezuela ayudó a varias empresas como la ex FUNSA y Envidrio a que pudiesen funcionar, con una actitud muy positiva y de mucha benevolencia”.

Por otra parte, dijo Couriel, “también tuvo que ver con el financiamiento de las compras de petróleo y en el momento que decide darnos el 25% de las exportaciones con un plazo de gracia de 15 años y una tasa de interés del 2% cuando en aquel momento en el mercado financiero internacional estaba por encima del 5%, no era un hecho menor, sino muy positivo para Uruguay”.

De manera que desde ese punto de vista lo que el Embajador está expresando es: “Miren estas cosas que ha hecho Venezuela. No queremos mirar a Venezuela y que nos siga otorgando este tipo de beneficios, queremos tener un avance en las relaciones comerciales, productivas y financieras”.

Exportaciones por casi U$S 200 millones

En cuanto a las relaciones comerciales bilaterales, el embajador Ramos indicó que “la balanza comercial es deficitaria para nuestro país porque mientras que nosotros exportamos a Venezuela US$ 199 millones, importamos US$ 687 millones”.

No obstante, “si hacemos una lectura más afinada de estos números, vemos que por concepto de petróleo -con  una posición arancelaria de 27,09- importamos US$ 679 millones, es decir, el 98%. Entonces, si restamos lo correspondiente a importación de petróleo podemos llegar a concluir que nuestras exportaciones son superavitarias porque mientras nosotros importamos de aquel país US$ 7:700.000, exportamos US$ 198 millones, es decir que la relación entre exportación e importación es de 26 a 1”.

Informó que “un análisis realizado por la DIPCI muestra que los quesos de pasta semidura representan el 37% de nuestras exportaciones. Estos, junto con los de pasta dura, conforman un 67% y, con los de pasta blanda, un 98%, lo que representa más del 41% de nuestras exportaciones. Lo sigue la leche en polvo entera, que aporta el 23% y luego la carne bovina con el 14%”.

“Casi el 80% de nuestras exportaciones están concentradas en queso, leche y carne. Cuando encaramos el trabajo con Venezuela no nos resultó satisfactorio tener concentradas nuestras exportaciones en esos tres productos. La DIPCI elaboró un comparativo de las exportaciones de Argentina, Brasil y Uruguay a Venezuela donde se identifican 16 productos nacionales que no exportamos a ese país y que se perfilan con un interesante potencial. Estos son: maíz, arroz, tabaco, papel, cartón, madera, autopartes, tractores de remolque carretero, semillas de girasol, pañales, toallas, maderas tropicales, entre otros”, agregó.

Por su parte, “Uruguay XXI mencionó en forma coincidente productos como medicamentos, pastas alimenticias, prendas de vestir, centrifugadoras”.

En conversaciones con las autoridades del Ministerio, “me informaron que se van a retomar las negociaciones para la efectiva complementación industrial en el sector autopartista y la formalización del régimen de licencias para la fabricación de vehículos de fabricación uruguaya”.

Fuente Imagen: lettertosanta.com.ar