La Plataforma Animalista se expidió de forma contraria a carios conceptos del Boletín informativo de la Academia Nacional de Veterinaria del Uruguay (ANV).
“En cuanto a las estrategias para el control de la población de caninos errantes, la Academia entiende pertinente aplicar eutanasia como forma de controlar la superpoblación canina
En cuanto a estas declaraciones, todas las organizaciones que integramos la plataforma, queremos expresar nuestro total rechazo
Nos apena que en pleno año 2020 sigamos teniendo profesionales que recomiendan matar a los perros abandonados.
¿Qué clase de trato le damos a los seres que conviven con nosotros?
¿Qué clase de enseñanza o mensaje se está dando a la población?
Hay que entender y hacernos cargo de los problemas que se han generado por la sobrepoblación canina. Culpa única y exclusiva de la falta de legislación, controles y responsabilidad de las personas.
Las medidas a ser implementadas para empezar a solucionar este problema son campañas de información y educación, campañas de adopción y castraciones, ayuda y trabajo en conjunto con refugios y organizaciones de protección animal.
A su vez el documento también recomienda «desarrollar un sistema de recolección humanitaria de animales errantes en todo el país..» e » implementar una red de refugios animales en todos los departamentos con dependencia directa de los gobiernos municipales (propios o tercerizados con supervisión municipal)
Creemos que el camino a seguir es apoyar a los refugios que ya existen y hacen esta labor; no vemos viable que haya refugios estatales, ya que la experiencia nos ha mostrado que a la hora de recortes siempre los animales pierden. Además tenemos casos de refugios estatales repudiables y de hecho, denunciables («Refugio» de La Paloma, «Refugio» de Maldonado).
En cuanto a las consideraciones sobre Ia importación de “ganado en pie” ellos no creen conveniente permitir el ingreso de ganado en pie a nuestro territorio.
Entendemos que estas preocupaciones son desde un punto de vista sanitario, preocupándose exclusivamente de los efectos negativos que podría causar el ingreso de animales enfermos y su contagio a otros, afectando la producción de los ganaderos.
Lo que no vemos es la preocupación de la academia veterinaria por la protección animal.
Cada año, nuestro país envía miles de animales vivos a Medio Oriente (Turquía/Egipto) para ser faenados de manera violenta. Varias organizaciones han denunciado el maltrato y extrema crueldad en estos llamados «barcos de la muerte», donde el ganado debe viajar en pie en largos y agonizantes viajes de 30 días o más, expuestos no solo a las inclemencias del tiempo (hay registros recientes de barcos que se hundieron durante el viaje, ahogándose en el mar los cientos de animales transportados) si no a todo la tortuosa experiencia del viaje en sí.
LO QUE SE DEBE PEDIR ES LA PROHIBICIÓN NO SOLO DE LA IMPORTACIÓN, SI NO DE LA EXPORTACIÓN Y ASÍ PONERLE FIN A ESTA COMERCIALIZACIÓN CRUEL.
Esperamos que algún día la academia trabaje con conciencia y empatía”.