La seguridad del electo presidente José Mujica estudia por estos días una serie de medidas para concederle garantías a quien ya dijo que no se moverá de donde vive, en una chacra escondida en un paraje localizado entre Paso de la Arena y el Cerro de Montevideo.

Un informe publicado por El Observador recuerda que antes de resultar electo presidente, José Mujica ya había adelantado que no se mudaría a la residencia de Suárez y Reyes y que permanecería en su chacra de Rincón del Cerro en donde vive junto a la senadora Lucía Topolansky, su esposa.

Desde el día de las elecciones nacionales un móvil policial custodia la puerta de la casa de Mujica. Además se dispuso un vallado que se dispuso a unos metros del predio para que la prensa no pueda ingresar. Sin embargo las medidas de seguridad en la chacra se deberán incrementar, por lo que ya comenzaron a realizarse algunas modificaciones en el predio.

Luis Reyes, constructor encargado de las modificaciones en la chacra, dijo este miércoles a la prensa que intentará otorgar “más comodidades” a Mujica manteniendo un estilo “austero”, acorde al estilo de vida del presidente electo.

Las reformas pretenden que en estos cinco años Mujica tenga espacios donde poder trabajar desde su chacra, previendo que ese será uno de los lugares donde el futuro mandatario mantendrá varios encuentros.

“Los cambios van a tener la impronta del Pepe, por su forma de ser. Con la austeridad necesaria, pero también con la comodidad que va a necesitar”, dijo Reyes.

Algunas de las modificaciones ya se comenzaron a implementar como una pequeña construcción que se realizó a metros de la casa de Mujica que está a disposición de los custodios para que tomen un descanso.

“Hay veces que cuesta entender en la austeridad que predicó (Mujica) como han vivido siempre”, explicó el constructor en relación a la forma de vida del futuro presidente.