Aunque en principio se había anunciado su entrada en vigencia para el primer día de este mes, el gobierno argentino decidió trasladar para la segunda quincena de agosto el cobro de la tasa migratoria de 5 pesos argentinos a toda persona que egrese de su territorio por vía terrestre, lo que ya había generado inquietud en nuestro país.

En el caso de quienes viajen por mar el costo será de 30 pesos, es decir un monto similar al de la tasa para abordar un vuelo internacional. El nuevo régimen apunta a que los ingresos derivados de la ampliación de la tasa migratoria se destinen a mejorar los controles internacionales, por la vía de capacitación de los recursos humanos e incorporar equipamiento de última tecnología.

Mientras tanto, en Uruguay surge la interrogante sobre el impacto que esta medida podría generar en el flujo turístico, a la vez de considerarse como un nuevo obstáculo a la integración, pese a que regiría un esquema de exoneraciones en el tránsito vecinal.