El titular de la Dirección General Impositiva, Nelson Hernández, advirtió a las prostitutas y taxiboys uruguayos que deberán pagar el nuevo impuesto de la reforma tributaria, debiendo facturar con boleta sus servicios.
Además de las protestas de los futbolistas, que aseguran que no tienen ningún beneficio por pasar a pagar mucho más, la DGI tendrá que lidiar ahora con el reclamo de los trabajadores y trabajadoras del placer, de las más viejas de las profesiones.
Esta nueva medida pretende obligar a las prostitutas y taxiboys a abrir una unipersonal y facturar por sus servicios, de acuerdo a las palabras de Hernández, quien aseguró que los trabajadores sexuales «pueden ser controlados por la administración tributaria».
Estas trabajadoras no están incluidas en otras soluciones pensadas por la DGI, como el monotributo que pagan los cuidacoches y a cambio del cual tienen varios beneficios sociales.