El titular de Ordenamiento Territorial, Roberto Villarmarzo consideró apropiado «bajar el número de población necesario para la denominación ‘villa´ (hoy entre 3000 y 4999 habitantes) y aumentar un poco el de «ciudad» (actualmente en 5000 personas), en el marco del estudio del proyecto de ley sobre categorización de Pueblos, Villas o Ciudades.

Los comentarios fueron formulados por Villarmarzo en la Comisión de Vivienda y Ordenamiento Territorial del Senado el martes 24 de junio de 2008.

La iniciativa, dijo Villarmarzo determina los siguientes siete parámetros de categorización: número de habitantes, enseñanza pública, salud pública, seguridad pública, transporte público, servicios y planificación, y ordenamiento territorial.

Según el proyecto de ley, explicó Villamarzo, «hay 206 localidades que podrían acceder a la categoría de ‘centro poblado´ -que estaría entre 150 y 999 habitantes-; 80 en condiciones de acceder a la de ‘pueblo´ -entre 1.000 y 2.999 habitantes-; sólo 21 podrían alcanzar la denominación de ‘villa´ -entre 3.000 y 4.999 habitantes- cuando en realidad hay 31 así denominadas; y, lo más importante, para la denominación ‘ciudad´ -o sea, más de 5.000 habitantes- tendríamos 72 localidades, cuando hoy hay sólo 51».

Por lo tanto, «estaríamos generando una expectativa, repito, pero luego habrá que explicar que sólo cumplen con el requisito del número de habitantes y no con los otros parámetros», sostuvo Villarmarzo.

«Haciendo los números hemos comprobado que hay 26 localidades que hoy no se denominan ciudad y que, atendiendo sólo al parámetro población, podrían llegar a adquirirla -estamos generando, pues, una expectativa importante-; que hay 12 localidades más que podrían estar en condiciones -por el número de pobladores- de denominarse ‘villa´; que hay 22 que actualmente lo son y que, sin embargo, no podrían serlo -es decir que nos estamos metiendo en un camino complicado-; que hay 37 localidades más que están en condiciones de denominarse ‘pueblo´, y 35 que lo son cuando, en realidad, no llegan al número de habitantes necesario», agregó.

Villamarzo estimó que «parecería bueno bajar el número de población necesario para la denominación ‘villa´ y aumentar un poco el de ‘ciudad´, que además acompañaría mejor la exigencia de otros países porque, en general, no hay ningún caso con menos de 10.000 habitantes. Nuestro caso sería una situación excepcional producto de la distribución de la población, de nuestra demografía y densidad, y de la desproporción entre el tamaño de la ciudad capital y el resto de las otras ciudades».

Por lo tanto, añadió, «aumentar la cifra de 5.000 habitantes parece razonable y, además, lo alejamos un poco más del de villa. Si el número exigido fuera de 10.000 habitantes, habría solamente 14 ciudades, por lo que esa cifra resulta muy elevada».

Para continuar con el estudio del proyecto se convocará al Instituto de Teoría de la Arquitectura y Urbanismo de la Facultad de Arquitectura, al Congreso de Intendentes, y al arquitecto Carlos Musso, especialista en el tema de centros poblados.