Responsables de la gestión del museo y parque Fernando García, junto a la Asociación de Amigos, crearon un proyecto para la fabricación de réplicas de carruajes y circuitos turísticos. Su implementación posibilitará la recuperación de algunos oficios y permitirá la autosustentabilidad de la antigua quinta, según consta en el artículo del diario La República en su edición del 24 de octubre de 2008. Acervo. En el Museo y parque Fernando García hay 31 carruajes de época fabricados entre 1870 y 1905. Similar a un estacionamiento pero de antiguos vehículos, luce la colección de carruajes del comerciante, político y coleccionista Fernando García. Un personaje de principios del siglo XX que se dedicó a la importación de whisky e incursionó en la fabricación de cigarrillos, además de integrar el diirectorio del Banco Comercial y ser vicepresidente del Banco Hipotecario. Al momento de fallecer, en 1945, a los 58 años de edad, donó su quinta, ubicada en camino Carrasco y Santa Mónica, a la Intendencia de Montevideo (IMM). En la actualidad, los carruajes que coleccionó García, a simple vista, parecen olvidados en el tiempo. Pero no es así, tanto los responsables en la gestión del museo como la Asociación de Amigos del Museo y parque Fernando García buscan recuperar la historia de esos carruajes, que representan parte de la historia de todos los uruguayos. En forma conjunta y con ayuda de organizaciones, crearon un proyecto ambicioso, que además de recrear parte de nuestro pasado, apunta a generar fuentes de trabajo y un nuevo servicio para los montevideanos y los turistas. Atracción turísticaEl sulky es un medio de transporte que permite recorrer la ciudad en forma distinta. En muchos lugares del mundo, los turistas pagan cifras inimaginadas por dar una vuelta en los antiguos carruajes, que son replicas de época. Desde el Museo Fernando García, idearon un proyecto con varios objetivos. «El primero es hacer un museo autosustentable a partir de emprendimientos productivos», explicó Luis Alvez, coordinador general de la iniciativa. Es decir que, mediante propuestas productivas, se obtendrán recursos para la restauración y mejora del lugar. «Actualmente tenemos un depósito de museo, donde hacemos visitas guiadas a escolares y otros visitantes, pero no hay una muestra montada como debería ser», reflexionó el responsable de la coordinación del proyecto. Otro de los objetivos trazados es la explotación de la temática que caracteriza al acervo; los carruajes. Por eso se realizarán replicas de época, como la efectuada recientemente sobre el carro que trasladó a los campeones olímpicos de fútbol, en 1928. También se busca desarrollar la cultura del trabajo, recuperando oficios que se están perdiendo. Para ello, apuntan a dictar cursos a los recicladores de residuos que utilizan carros tirados por caballos, para que sean estos trabajadores segredados quienes -aprovechando su experiencia- se encarguen de conducir las réplicas de carruajes que recorran la ciudad. Además de la reconstrucción de los 31 carros que hay en el museo, elaborados entre 1870 y 1905, buscan crear una veta turística. Por el momento tienen previsto ofrecer servicios para los turistas que lleguen en los cruceros. Pero además, comisiones de distintos barrios se han mostrado interesadas en la propuesta. El proyecto fue presentado en la Junta Nacional de Empleo y en diversas agencias de cooperación, y cuenta con el apoyo de distintas instituciones. De ser aprobado en un corto plazo, a finales del año que viene será posible ver transitar los sulkys en los barrios, como un gran atractivo turístico. CARRO OLIMPICO La creación de la réplica del carro que trasladó a los campeones olímpicos de fútbol de nuestro país, en 1928, «implicó una investigación exhaustiva de cada una de las piezas», comentó Luis Alvez, funcionario del museo Fernando García. La construcción del modelo del año 1884 llevó aproximadamente tres meses, pero Alvez explicó que «luego de que se tiene el modelo inicial, la producción se hace en menos de cuarenta días». Los integrantes del proyecto estiman que el paseo para los turistas costará entre 25 y 30 dólares. Fuente: Diario La República. http://www.larepublica.com.uy