Una organización ecologista norteamericana denunció al presidente Barack Obama por haber matado una mosca y ese gesto puede tener consecuencias más allá de la muerte del animal.
La organización defensora de los animales anunció que quiere que el presidente Barack Obama muestre una actitud más compasiva la próxima vez que una mosca lo moleste en la Casa Blanca.
La organización Personas por un Trato Ético a los Animales envió al primer mandatario norteamericano un dispositivo que permite atrapar insectos voladores molestos que se encuentren en las casas para liberarlos después en el exterior.
«Estamos en favor de la compasión, incluso para los animales más fastidiosos, pequeños y antipáticos», dijo ayer Bruce Friedich, vocero de la entidad. «Creemos que la gente, cuando pueda ser compasiva, debe serlo con todos los animales».
En esta semana, irritado por el revoloteo incesante de una mosca durante una entrevista televisada en la Casa Blanca, Obama decidió hacer justicia por mano propia.
Obama le dijo a la mosca: «Vete de aquí», pero el insecto se negó. Entonces, Obama esperó a que la mosca se posara, alzó la mano y la aplastó al primer intento. Como si nada hubiese ocurrido, el presidente preguntó al periodista John Harwood, de la CNBC: «¿De qué estábamos hablando?»
El presidente de Estados Unidos se tomó un segundo más para jactarse de la hazaña. «Impresionante, ¿no?», dijo Obama. «Atrapé al bicho».
Las cámaras seguían grabando en la Sala Oriental de la Casa Blanca. Obama ni se inmutó. Señaló el insecto muerto y preguntó: «¿quieren grabarlo?».
CNBC lo hizo y la mosca muerta se hizo celebre.
«Matar una mosca ante la televisión indica que él no es perfecto», dijeron desde la ONG ecologista.