Difundimos el Comunicado con fecha viernes 17 de julio de la Secretaría de Asuntos Sociales del PN ante la marcha “Operación Memoria” del PIT-CNT.

Ante la marcha anunciada por los principales dirigentes del PIT – CNT para las próximas semanas, la Secretaría de Asuntos Sociales del Partido Nacional quiere enviar un mensaje a todos los trabajadores de nuestro país:

1.         No es una coincidencia que los principales dirigentes del PIT – CNT hayan decidido en este momento organizar una marcha en todo el país. Las razones son bien claras: En el acto electoral del 28 de junio pasado el Frente Amplio ha demostrado que tiene problemas para convocar a su militancia partidaria. Por otra parte, dicha coalición política ha puesto de manifiesto sustanciales diferencias en los aspectos programáticos, hecho que se ha confirmado también en la conformación de la fórmula Mujica – Astori.

2.         Tampoco es una coincidencia que los anuncios y las movilizaciones se organicen en momentos en que la fórmula Mujica – Astori haya decidido comenzar una gira por el interior del país para culminar en un acto en Montevideo.

3.         Además, el acuerdo entre el Partido Comunista y el MPP para las internas partidarias, ahora se consolida en la estrategia de movilización en los sindicatos y otras organizaciones controlados por estos sectores.

4.         Parece claro entonces que, independientemente de la excusa que se utilice,  todas estas actividades están creadas con el objetivo de polarizar y dividir a la gente, otra vez entre buenos y malos. Paralelamente, se está intentando esconder las enormes contradicciones que tiene la izquierda en todos los temas, utilizando como ha sido habitual, las estructuras y los recursos económicos de los gremios sindicales para hacer favores político-partidarios.

5.         Una vez más la dirigencia sindical relega los intereses de los trabajadores a los temas partidarios, desconociendo que todos los trabajadores se expresan en las urnas cuando son convocados en los actos electorales previstos en la Constitución de la República y que, aunque no les guste, la mayoría se expresó en diferentes opciones partidarias.

6.         Exhortamos a todos los trabajadores del país a no participar en actividades donde se mezcla la campaña electoral con supuestas reivindicaciones que, aunque algunas puedan ser compartibles, esconden un sectarismo que siempre hemos combatido.

7.         Por último, los blancos que militamos en los diferentes ámbitos sociales, no tenemos inconvenientes en discutir abiertamente todas las cuestiones que apunten a clarificar diferentes aspectos de la historia reciente. Pero que la discusión no sea sesgada en función de los intereses de quienes quieren imponer una historia oficial. El movimiento sindical le debe al país un análisis en profundidad y una autocrítica sobre las posturas adoptadas desde 1970 hasta la fecha. No sólo es importante discutir sobre la década de los 90´, es imprescindible discutir cuáles fueron las posturas de la CNT cuando los militares emitieron “los comunicados 4 y 7”, cuáles fueron las principales posturas del PIT – CNT a la salida de la dictadura. Es imprescindible saber, si realmente estamos dispuestos a defender radicalmente las libertades públicas o se seguirá diferenciando dictaduras de “derecha” con las dictaduras de “izquierda”.

A los trabajadores

La Mesa Ejecutiva de la Secretaría de Asuntos Sociales del Partido Nacional desea reiterar a sus afiliados y a todos los trabajadores los criterios que sustenta, para que pueda manejarse libremente, en esta etapa de efervescencia político – sindical  que atraviesa nuestra sociedad.

No compartimos que gremialistas importantes agasajen a un mandatario extranjero que viene a buscar apoyo para despenalizar una droga de su país (suficientes problemas tenemos con las nuestras) y a explicarnos el problema hondureño y los manejos imperiales (Herrera nos enseñó: allá los rubios y los amarillos…).

En cuanto a estigmatizar la década de los 90, nos vienen a la memoria otras décadas. La de los 40 cuando se expandía el comunismo y los trabajadores uruguayos eran víctimas de luchas ideológicas y no por sus salarios. La de los 70, cuando unas proclamas de tinte peruanista, fascinaron a muchos, que al dudar, permitieron a los militares afirmarse y organizar la barbarie del Plan Cóndor que llevó a la muerte en  el fondo del mar con los vuelos de la muerte, a  trabajadores uruguayos de todas las ideologías.

Nos interesa mucho más esta década de los 2000 que vivimos y soportamos. Con el IRPF, que grava montos inferiores a la canasta básica. Con humildes y honestos  comerciantes  (en definitiva sacrificados trabajadores)  que todos los días son rapiñados, baleados y muertos en todos los barrios donde reina la anarquía total.  Nos preocupan hacia futuras décadas, los desprolijos y clientelísticos planes de erradicación de la pobreza (que ni siquiera han  podido con la miseria) y que sólo logran humillar y desmoralizar a quienes realmente salen a trabajar todos los días por salarios paupérrimos.

Rechazamos una vez más la organización de marchas “forzadas”, contra políticas del pasado. Nos parece mucho más importante que el PIT CNT, vuelque su importante aparato administrativo y gremial –  que también integramos –  en lograr que el 70 %  (o más) de los trabajadores uruguayos, no afiliados a sus sindicatos, se integre a los mismos para darle auténtica legitimidad a sus reclamos. Ser los más representativos no sólo lo pide la OIT, lo reclama también el pasado glorioso de nuestra clase trabajadora.

Cada uno volvemos a reiterar, desde el ámbito innegociable de su propia conciencia, podrá decidir  a quien votar en las próximas elecciones. Si a quienes anunciaron que iban a arrancar las raíces de los árboles (y no lo hicieron) o a quienes anuncian que prenderán la motosierra (que corta los troncos que no florecen). Nosotros vamos a seguir – que nadie lo dude – bregando para que algún día, los que mezclan política y empleo, se den cuenta de que ambas cosas no son compatibles. De tanto en tanto – en todas las décadas – las encrucijadas del destino nos dan la razón.

Guillermo Rey.  Presidente y  Ana De Vita.  Secretario.