Ya suman las 700 armas las incautadas por el fallecido contador Saúl Feldman, autor del hecho policial más trascendente de los últimos años.

Jorge Díaz, el juez especializado en crimen organizado que lleva la causa, señaló que también se llevan contabilizadas 40 mil municiones para recarga de todo ese arsenal en el que también destaca indumentaria militar, entre ella, cascos, chalecos y máscaras antigas.

El Departamento de Información e Inteligencia del Ministerio del Interior trabaja para establecer como llegaron las armas al ultimado contador de 64 años y hacia donde iría ese arsenal.

La hipótesis de que el hombre estaría aprontando un embarque hacia Brasil gana terreno en la medida de que en su casa del barrio Aires Puros se encontraron lingotes y monedas de oro. Se sabe que las organizaciones de narcos y delictivas de Brasil generalmente pagan con ese metal las compras clandestinas de armas.

Entre los fusiles encontrados, destacan cinco fusiles FAL pertenecientes a las Fuerzas Armadas de Uruguay, situación que abrió otra línea de investigación.

Por el momento, la Policía descartó de plano cualquier móvil político detrás del poderoso arsenal encontrado.

El juez Jorge Díaz iniciará una ronda de interrogatorios a los policías que actuaron en el procedimiento de Shangrilá, principalmente aquellos que vieron con vida al contador Saúl Feldman antes que este decidiera atrincherarse allí y balear a los policías que fueron a detenerlo.