El jueves 7 de abril la Firma Deloitte presentó los resultados de una gran investigación la cual logró identificar factores comunes que aseguran el éxito empresarial en diversas organizaciones. Como resultado de esta investigación de dos años de duración Deloitte desarrolló el concepto “As One”.

Deloitte afirma que: “As One son solo 5 letras, pero sumadas a cualquier palabra cambian completamente su significado. Trabajar versus Trabajar As One, Crear versus Crear As One, Ganar versus Ganar As One. El comportamiento As One simboliza la

transición desde la acción individual hasta el liderazgo colectivo. Describe cómo las personas juntas pueden alcanzar logros asombrosos”.

Presentación As One: Verónica Melián – Socia del Departamento de Capital Humano de Deloitte – Stephen Langton – Director general del Centro de Liderazgo Colectivo de Deloitte.

La investigación que dio origen a este enfoque se basó en el análisis de casos de estudio de empresas exitosas (pueden leerse en www.asone.org/asone/stories.html). A partir de la aplicación de técnicas de análisis de datos de última generación, se lograron identificar una serie de características clave que explican las distintas formas en que grandes grupos de personas trabajan juntas “As One”.

Uno de los principales hallazgos de esta investigación, desmitifica la creencia de que los estilos de liderazgo efectivo son solo dos: o bien comando y control o el colaborativo. Incluso demuestran que el enfoque de comando y control no está pasado de moda si no todo lo contrario; algunas organizaciones pueden beneficiarse de entornos más colaborativos y otras no.

“No se trata solo de un tema de planificación sino de cómo hacer que las personas elijan colaborar y mantengan el esfuerzo hacia los objetivos comunes de la organización. La palabra fundamental es elegir”, dijo Stephen Langton, director general del Centro de Liderazgo Colectivo de Deloitte donde se desarrolló la investigación.

Resultados: Hasta ahora la investigación reveló que existen ocho modelos de trabajo: “los arquetipos”, que se conforman en torno a dos ejes. El primero define la forma en que se ejerce el poder y la dirección en la organización, desde la alta centralización hasta la descentralización total. El segundo define la naturaleza de las tareas, que pueden ser desde estrictamente programadas y definidas hasta altamente creativas.

La clave está en que los ocho modelos de trabajo identificados resultan efectivos si se aplican en el contexto adecuado.

“El arquetipo ideal depende del contexto y puede cambiar con el paso del tiempo. Las organizaciones necesitan cosas distintas en momentos diferentes y muchas veces necesitamos líderes diferentes. En un contexto de crisis la forma de funcionamiento interno va a ser totalmente diferente con respecto a un contexto en el que queremos

más innovación y desarrollo o expansión. No es una recta”, menciona Verónica Melián, Socia del departamento de Capital Humano de Deloitte.

Algunos ejemplos:

Terrateniente e Inquilinos: los Terratenientes tienen el poder y determinan la estrategia, controlando los recursos y el acceso al mercado y definiendo las reglas de participación de los Inquilinos. Los inquilinos se unen voluntariamente pero una vez bajo el dominio del terrateniente tienen que adecuarse a sus normas. Las tiendas de apps de Apple siguen este enfoque, la empresa determina las reglas y ofrece el acceso a los clientes de Apple para desarrolladores de aplicaciones.

Productor y Equipo Creativo: al Productor se le ocurre la gran idea, visualiza el resultado final y guía al equipo.

De esa forma funcionan las producciones del Cirque du Soleil, la energía y el brillo provienen de una cultura abierta y colaborativa entre miembros de un equipo con mentalidad independiente y altamente capacitados.

También La Clínica Mayo constituye otro ejemplo de este modelo de trabajo.

Deloitte asegura que la fuerza del enfoque As One proviene de concentrar los esfuerzos en las prioridades organizacionales donde la colaboración constituye un factor crítico de éxito.