La Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y la Dirección Nacional de Sanidad de las Fuerzas Armadas firmaron este jueves 11 un convenio de complementación a efectos de optimizar el uso y las capacidades instaladas de los laboratorios de ambas instituciones para mejorar la producción, control y abastecimiento de medicamentos. Se estima que con la producción propia, se ahorra entre un 34 y un 44 por ciento.

El acuerdo fue suscrito por la presidenta y vicepresidente de la Administración de los Servicios de Salud (ASSE), Beatriz Silva y Enrique Soto, y el director nacional de Sanidad de las Fuerzas Armadas, Guido Manini Ríos. Estuvo presente el ministro de Salud Pública, Jorge Venegas.

Este trabajo conjunto prevé generar un trabajo complementación entre el laboratorio farmacéutico de la Dirección Nacional de Sanidad y el laboratorio Borrego de ASSE a efectos de optimizar el uso y las potencialidades de sus capacidades instaladas para mejorar la respuesta de ambas instituciones de acuerdo a la demanda de la red pública de salud.

Las actividades a realizar por ambas partes incluirán la producción de medicamentos; realización de análisis del control de calidad (materias primas, producto terminado, insumos varios); ejecución de desarrollos fármaco-tècnicos y colaboración en logística y distribución.

El ministro Jorge Venegas sostuvo al término del acuerdo que el sistema público “puede ir a más”. “Este convenio fortalece el eje público en cuánto a la elaboración y control de medicamentos en función de las necesidades de nuestra población”, añadió.

Antialérgicos y suero oral son dos de los medicamentos elaborados por los laboratorios de estas instituciones. Venegas recordó que sanidad militar atiende hoy a casi 190 mil usuarios y que en general el sector público presta servicios a casi la mitad de la población del país.

El ministro también hizo referencia a la importancia de la instalación de una planta de residuos hospitalarios, inaugurada la semana pasada. “Por primera vez se conforma una estructura que dá andamiento al procesamiento de residuos hospitalarios. Se van a procesar alrededor de 500 kilos por día de residuos”, acotó.

A su juicio, es necesario «caminar» hacia la formulación de unidades de alta capacitación como un IMAE cardiológico. “Yo mencioné que las Fuerzas Armada necesitan un IMAE traumatológico. Por lo tanto, estamos diciendo que un hospital que brinda servicios a un número muy importante de ciudadanos no solamente debe abrir la cobertura sino también mejorar en calidad”, sostuvo.

Por su parte, Guido Manini Ríos resaltó que el trabajo conjunto de ambos laboratorios en ciertas áreas permitirá evitar gastos innecesarios y el consiguiente ahorro de recursos que podrán ser destinados a otras áreas. El director de Sanidad Militar sostuvo que el laboratorio de sanidad militar fabrica más de un centenar de medicamentos para sus usuarios.

Intercambio entre ambas instituciones

En 2011 se han realizado distintos intercambios entre ambos laboratorios. El laboratorio Dorrego cedió a Sanidad Militar 57 kg de siete materias primas diferentes a cambio de cual el laboratorio farmacéutico de Sanidad Militar realizó 28 análisis de productos terminados y materias primas para el laboratorio Dorrego.

 

Esto permitió la optimización del uso de materias primas ya adquiridas y el ahorro en la realización de análisis en laboratorios de control de calidad externos aprovechando las fortalezas de los laboratorios públicos.

El laboratorio farmacéutico de las Fuerzas Armadas invirtió en equipamiento lo que le permitió tener una capacidad de abastecimiento a corto plazo de 6000 unidades de Clorfeniramina solución x 100 mL, y alrededor de 1.000.000 de comprimidos de Haloperidol 1 y/o Haloperidol 5. Esta producción propia posibilita un ahorro de entre 34 y 44 por ciento en relación a los precios del mercado.

Por otra parte, se avanza en el proyecto de recuperación del laboratorio Dorrego cuya finalización está estimada para julio de 2013. ASSE adquirió distintos tipos de maquinaria y equipamiento para dicho laboratorio al tiempo que se resolvió reinstalar la producción de sólidos que estaba en el subsuelo del local, reciclando la planta de ex piretroides, que se encontraba abandonada.

Actualmente dicha obra se encuentra adjudicada y a evaluación de la comisión de obra. El monto aproximado de los trabajos es de 22 millones de pesos.

Fuente: Presidencia de la República. www.presidencia.gub.uy