Compartimos el comunicado de prensa de las organizaciones que se movilizaron “en defensa de la Tierra y los Bienes Naturales”.

Estimadas/os periodistas y comunicadores.

Montevideo, 11 de octubre de 2012.

La 3ª Marcha Nacional en defensa de la Tierra y los Bienes Naturales se desarrolló en la jornada de hoy en total armonía y con un marco diverso de público proveniente del interior rural –varios a caballo-, de la costa oceánica y de las cabezas departamentales, incluyendo Montevideo. La Avenida 18 de Julio estuvo, entre las 18 y las 19.30 hs. colmada de ancianos, adultos, jóvenes y decenas de niños que, con carteles de distintas consignas, marchaban juntos hacia Plaza Independencia extendiéndose por un total de 10 cuadras. Se estima que asistieron 8000 personas, a pesar de lo cual no se registró ningún incidente, y el clima predominante fue de celebración, con instrumentos, disfraces y otras muestras de creatividad asociadas al tema. Automóviles y omnibuses hacían sonar sus bocinas al paso de la marcha. Los manifestantes repartieron miles de copias del volante que se adjunta.

Con esta nueva respuesta a la convocatoria de más de 30 organizaciones de todo el país, se confirma la falta de consenso social para el avance de proyectos como el de Aratirí-Zamin Ferrous y el amplio cuestionamiento que despierta la imposición de un modelo extractivo de desarrollo, sin debate previo y sin escuchar a las comunidades afectadas. Las reivindicaciones de larga data, como la de tierra para quien la trabaja, siguen vigentes y se suman a algunas más recientes como la defensa del agua, sellada en la reforma constitucional en 2004. Y una nueva ola de conciencia llega desde la costa de Rocha, que se moviliza ante la incertidumbre sobre la convivencia del turismo con nuevos puertos sin estudios de impacto que los respalden.

La lista de organizaciones y colectivos convocantes (se adjunta en dossier anexo), con las que marcharon otros tantas y miles de ciudadanos sin afiliación alguna, da cuenta de un movimiento que crece y donde confluyen preocupaciones diversas pero unidas por la defensa de la tierra y los bienes naturales.