El Banco Hipotecario del Uruguay (BHU) recibió una nueva certificación de calidad, esta vez por su proceso de gestión de Recupero de Créditos. Además, fue recertificado el sistema de gestión de Crédito de la institución.

“Con orgullo podemos afirmar que el corazón del BHU está certificado en calidad”, dijo la presidenta de la entidad estatal, Ana Salveraglio, quien destacó que las certificaciones aseguran a los clientes “un tratamiento uniforme y estandarizado” en todas las oficinas del banco. “Esto garantiza que todos los procedimientos y trámites se ejecutan de la misma forma en todas partes y para todas las personas”, explicó.

Por otra parte, la jerarca relató que el proceso que derivó en la certificación de calidad comenzó hace más de dos años, a partir de una iniciativa planteada por un grupo de funcionarios. “Al principio parecía un poco loco impulsar este proyecto en medio del proceso de reestructura que también se estaba implementando, pero hoy estamos convencidos de que fue una idea muy buena”, dijo Salveraglio, instantes antes de recibir el reconocimiento de manos del director ejecutivo de la certificadora LSQA, Jorge Arismendi.

Asimismo, la jerarca resaltó la importancia que tiene llevar adelante un proceso de certificación de calidad para la institución en general y para los clientes. “Llama la atención cómo la gente se involucra con esto. El entusiasmo se contagia al resto de la organización, no sólo entre los funcionarios que forman parte de los procesos que están siendo certificados. Y todo esto se centra y se fundamenta en lo que es más importante para nosotros: el cliente”, expresó.

En tanto, Arismendi indicó que “los elementos de base para un buen sistema de gestión de la calidad forman parte de la identidad del BHU; no hubo que generarlos, ya estaban allí”. También destacó que “someterse a una certificación en paralelo en medio de un proceso de reestructura fue un desafío adicional, pero que fue muy bien resuelto”.

A su vez, el director ejecutivo de LSQA resaltó que el BHU tiene “altos niveles” de compromiso y de liderazgo, y “grandes fortalezas” en todo lo que implica el desarrollo de los procesos de mejora continua. “No todas las organizaciones son capaces de pensarse sistémicamente. Habitualmente se cae en el típico organigrama de áreas de trabajo, cuando hay que pensar y enfocarse en los procesos, que cruzan todas las áreas. Y el BHU ha demostrado tener muy bien aceitado ese enfoque sistémico”, afirmó.