La Fundación Gonzalo Rodríguez cerró el 2013 con la satisfacción del deber cumplido, especialmente porque logró consolidar sus objetivos de expansión, tanto a nivel nacional como internacional.

Entre las metas alcanzadas, se encuentra la reciente reglamentación de la ley que obliga el uso de los sistemas de retención infantil, un hecho que marca un antes y un después en la seguridad vial de Uruguay. “Hemos trabajado largamente para esto, nos llena de alegría y nos motiva a seguir trabajando por la seguridad de los niños”, expresó Rosa Gallego, directora ejecutiva de la organización.

Para la difusión de la ley se realizaron acciones en el interior del país a través del Programa Nacional de Puntos de Control, llegando a 6 ciudades y totalizando casi 4.000 kilómetros.

A su vez, la fundación Gonzalo Rodríguez logró darse a conocer de manera efectiva con campañas exitosas y programas como Escuelas Deportivas, el más antiguo de la fundación, que promueve el deporte como forma de inclusión, o las actividades que lleva adelante con más de 100 niños.

Se realizaron más de 20 charlas y presentaciones en todo el país para más de 1.500 personas, mientras se continuó con la actividad de Puntos de control, incrementando la cantidad de adultos (+400) y de SRI instalados (+500)

Como nunca antes, la fundación salió al exterior a difundir su trabajo, a intercambiar experiencias en más de 20 ciudades de 13 países, recorriendo cerca de 70.000 kms, suficientes como para dar casi dos vueltas al mundo.

Fue también el año de la consolidación de programa Latin NCAP, en el cual, en sólo tres años de trabajo, por primera vez tres vehículos fabricados en la región alcanzaron la máxima calificación posible de cinco estrellas.

La Fundación Gonzalo Rodríguez, como cada día desde hace ya más de 13 años, continúa planteándose nuevos desafíos a nivel nacional e internacional asumiendo nuevas responsabilidades y buscando nuevos sueños, que son su motor para imaginar un país y un mundo mejor con más educación, más salud, mas desarrollo, dónde las sonrisas de los niños estén siempre presentes.