Compartimos la Columna del Domingo del 3 de agosto del candidato único del Partido Colorado, Pedro Bordaberry bajo el título “Defraudaron”.

“Durante mucho tiempo el Frente Amplio repitió y repitió que, desde el gobierno, cambiaría el país. Junto a ello prometía honradez y gobierno de primera.

Muchos uruguayos creyeron, de buena fé, esas promesas y les dieron finalmente la posibilidad de gobernar.

Luego de nueve años en el gobierno nacional y de 25 en el de la Intendencia de Montevideo esas promesas permanecen incumplidas.

Todos sabemos que gobernar no es fácil y que se necesita tiempo para que las cosas sucedan. Pero luego de estos nueve años ya nadie duda que en muchas áreas esenciales del país las cosas no sólo no mejoraron sino que empeoraron.

La Educación sufre desde hace ocho años un deterioro constante que se manifiesta en alarmantes indices de repetición y deserción, sólo uno de cada tres uruguayos completan el bachillerato y la Universidad de la República anunció esta semana que había caído, de nuevo, la cantidad de egresados de la misma. Tenemos de los peores indicadores en ambos casos a nivel de países sudamericanos y es una hipoteca que debemos empezar a levantar de inmediato. Sin preparación no hay formación de capital humano y, sin este desarrollarse es una quimera.

Sobre la seguridad o inseguridad ya queda poco por decir. Pasamos de 6500 rapiñas por año en el 2005 a 17.500 en el 2013. De 199 homicidios por año a más de 280 en los últimos dos.

Prometían que con gobiernos de la misma ideología en la región se terminarían los problemas con Argentina y Brasil. Nunca estuvimos peor.

Les quedaba la economía.

A caballo del aumento de los precios internacionales de nuestros productos de exportación en general y los agropecuarios especialmente y la baja de las tasas de interés internacionales nuestra economía creció por encima de las previsiones gubernamentales en los últimos 9 años.

Pero, pese a ese crecimiento, el Frente Amplio, producto de recurrentes y crecientes déficits en las cuentas públicas hizo crecer nuestra Deuda de una forma irresponsable.

Nos anunció una y otra vez que estaba haciendo un gran manejo de la misma, aprovechando coyunturas favorables en los mercados mundiales, postergando vencimientos (refinanciándola) y pesificándola.

A cada rato se nos anunciaba y se autofelicitaba por el manejo referido. Es cierto que así fueron los hechos, pero no se hizo nada diferente a lo que antes de ser gobierno criticaban sin piedad, únicamente que a un costo descomunal, que nunca había pagado el país.

También se dijo que en relación con el PBI la Deuda había bajado. Lo que es una verdad, pero una verdad a medias.

Porque si bien esto es cierto haciendo determinada comparaciones, no lo es si se analizan las cifras correctamente. De todos modos, lo más cierto es que en términos reales hoy debemos mucho más que en el año 2004.

En el año 2004 el Uruguay debía 12.824 millones de dólares. Lo que equivalía a que cada uno de nosotros debía 3.884 dólares.

Ahora las cifras dicen que Uruguay debe 33.181 millones de dólares, es decir más de dos veces y media. Cada uno de nosotros pasó a deber hoy 9.872,5 dólares.

Si nos comparamos con otros países per capita somos los que mas debemos. Puesto que nosotros debemos 9.872,5 por cada habitante, mientras que cada argentino debe 5.519, brasileño 7.503, chileno 1.924, colombiano 2.575, costarricense 3.860, mexicano 4.940, paraguayo 632,5 y peruano 1.305.

Pese a ello los economistas afines al gobierno nos dicen que hay que medir la Deuda en relación al PBI.

Yo creo que ese es uno de los elementos a tener en cuenta. Pero no prestarle la atención a que en el 2004 debíamos 13 mil millones y hoy 33 mil, es un error. Multiplicar la deuda por dos y medio en épocas de bonanza es un acto de irresponsabilidad o impericia,. No hay otra posibilidad.

Otra respuesta que se da es que se aumentó la Deuda, pero también las reservas que según el gobierno ascendían a 16.500 millones a la misma fecha que se mide la deuda. Entonces, se nos dice, “en realidad debemos menos porque tenemos reservas por casi la mitad.“

Otra verdad a medias.

Porque de esas reservas hay más de 7.500 millones que es dinero del Sector Financiero por Encajes, de las AFAP, las Compañías de seguros y otros agentes privados que no son disponibles.

Pero lo peor es que gran parte de la Deuda, unos 150.000 millones de pesos (unos 6.500 millones de dólares) tiene una tasa de interés del orden de 15%, con un costo en dólares que en el promedio de los últimos años, superó el 10% anual..

O sea que debemos y pagamos al 10% de interés, pero los dólares que tenemos los colocamos a una tasa inferior al 1%.

Para ser claros, como reconoció el hoy Ministro Bergara en el Parlamento hace un año, la diferencia entre el interés que pagamos por la Deuda y el que nos pagan por los dólares que colocamos, signfica más de 700 millones de dólares por año de pérdidas.

El tan manido manejo profesional de la Deuda y acopio de reservas nos cuesta una fortuna.

Una herencia maldita que enfrentaremos el primero de marzo. Tenemos el programa para terminar con eso.

Lo otro que el Frente Amplio prometió fue un gobierno honrado. Los sucesos acaecidos primero en los Casinos municipales, en Pluna después y finalmente en ASSE, confirman que dicha promesa tampoco fue cumplida.

Quizás es por ello que muchos uruguayos que legítimamente creyeron en el proyecto que les presentó el Frente Amplio, hoy se sientan defraudados.

A esos defraudados les ofrecemos, con humildad, una mejor educación, más seguridad, una buena gestión, honestidad, y un compromiso de cambio”.

Fuente Imagen: www.eleccionesenuruguay.com