Además de inocular a la población contra la rubéola y sarampión sobre todo en las zonas fronterizas con Brasil, otro objetivo es el control del embarazo, porque se construye a través de una madre el futuro del país. Entre otras patologías, es posible eliminar la sífilis connatal en Uruguay por que están dadas las condiciones para alcanzar ese objetivo, dijo Muñoz.

Además el sistema cuenta con insumos para la realización por ejemplo de análisis rápidos de VDLR en todos los centros de atención primaria del país. A través del Fondo Nacional de Salud, se estableció como meta para todas las instituciones del sector privado, controlar el embarazo, a la embarazada y al niño en los primeros años de vida.

El cambio de modelo de atención está basado en la promoción, prevención y en apostar fuertemente al primer nivel de atención, para volver a contar con un médico de familia, ya que la salud no es sólo material de un médico sino que forma parte de un equipo multidisciplinario, aspectos que deben tomarse en cuenta para un abordaje profundo como lo exige la medicina moderna.

Muñoz enfatizó que esta transformación partió de una realidad en el sistema de cobertura médico uruguayo que tenia prestación en sus servicios en forma desorganizada, no sistemáticas, no articuladas, pero además no preparada para enfrentar el modelo epidemiológico que tiene el Uruguay.

El punto de partida para cambiar este cuadro de situación, fue atender y facilitar la medicación a los pacientes crónicos como es el caso de los diabéticos, transformando hábitos y prácticas en la población como el dejar de fumar y no fumar en ambientes donde coexisten personas no fumadoras, ya que dos tercios de los uruguayos no fuman frente al tercio que si lo hace.

Otro de los cambios instrumentados fue poner al alcance de los pacientes que padecen enfermedades mentales crónicas, fue poner la medicación a su alcance ya que por el costo de los tickets, en un gran número de enfermos no podían acceder a la medicación indicada.

La racionalización del sistema parte del reconocimiento que el sector público tiene mucho más equipamiento en el primer nivel de atención lo que constituye una de las grandes fortalezas que tienen los Servicios de Salud del Estado.

Muñoz dijo que si bien el sistema necesita fuertes inversiones en distintas áreas, uno de los componentes claves en la transformación integral del sistema, lo conforma las mejoras paulatinas de la red física del MSP que cuenta con 280 mil metros cuadrados construidos, donde en la mayoría de los casos no hubo inversión alguna en los últimos 30 años.

Fuente: Informe Semanal de Sepredi. Presidencia de la República.