El cultivo de la soja, en pocos años pasó de tener un área
casi residual a contar con la mayor superficie en materia de granos. En la
zafra 1999/00, el área sembrada se ubicaba en 8.900 hectáreas,
mientras que en la zafra 2007/08 se estima en unas 450.000 hectáreas.


El «fenómeno» soja no solo tuvo un crecimiento muy vertiginoso
en materia de área sembrada, sino que los rendimientos acompañaron la
superficie sembrada. En la zafra 1999/00 fue de 768 kilos por hectárea,
mientras que en la zafra 2005/06 se ubicó en 2.044 kilos por hectárea.

Para esta zafra, (2007/08), el ingeniero agrónomo Gonzalo Souto, de la Oficina de Programación y
Política Agropecuaria (Opypa), comentó a Ultimas Noticias que el cultivo es muy
heterogéneo debido a la importante cantidad de hectáreas sembradas dispersas
por todo el país. Aclaró que la gran mayoría no presenta dificultades,
«pero al ser tan amplia el área, algunas chacras han sufrido el efecto de
la seca o han sido sembradas muy tarde».

Señaló que los datos brindados por la Dirección de Estadística Agropecuaria (Diea)
estimaban una superficie de cultivo en el entorno de las 450.000 hectáreas,
lo que representa el 50% del área dedicada a los cultivos de verano. «De
hecho, a la hora de realizarse la encuesta (mediados de diciembre de 2007), ya
se había sembrado casi la mitad de la misma (48%)».

Agregó que por dificultades climáticas (sequía) se sembró hasta bien avanzado
el mes de enero, «pero los precios continuaron al alza en forma constante,
lo que animó a los agricultores, a pesar de ser conscientes que perderán
kilos», sostuvo.

El técnico de Opypa manifestó que la cosecha del cultivo es muy probable que
comience a comienzos de marzo, en aquellas chacras que sembraron más temprano y
en la zona norte. Ante la gran dispersión del cultivo, se estima que podría
extenderse hasta el mes de mayo.

Consultado sobre los diferentes usos de la soja, Souto dijo que en el mercado
interno es utilizada para la confección de aceite. A su vez, el subproducto
derivado (pellet de soja) es utilizado como alimento para el ganado.

En cuanto al aceite, explicó que para su fabricación es mezclada con girasol o
maíz, ya que el producto puro no es del agrado del consumidor. «Si se
fuera a utilizar solo soja para abastecer el consumo interno, se necesitaría
150 mil toneladas, mientras que si se fabrica aceite de girasol puro para el
mismo fin, las necesidades llegarían a las 60.000 hectáreas».

DESPLAZAMIENTO

Las fuertes inversiones en soja -sobre todo en el litoral, a partir del
desembarco de empresarios sojeros argentinos- determinaron el desplazamiento de
la ganadería, que perdió espacios.

La llegada de argentinos se fortaleció a partir de los impuestos a las
exportaciones que dispuso el gobierno de Néstor Kirchner.


Fuente: Diario Últimas Noticias. http://www.ultimasnoticias.com.uy