Unos 1.800 hurgadores callejeros se acercaron en forma voluntaria a los distintos centros de inscripción que la Intendencia Municipal de Montevideo dispuso en varios puntos de la capital para llevar a cabo el censo de clasificadores de residuos, obligatorio para todos aquellos que desempeñen esa tarea. Se trata de un relevamiento que servirá para determinar cuántas personas viven de la recolección de residuos y las condiciones en las que trabajan.Uno de los objetivos que tiene la comuna es el de utilizar los datos aportados por dicho censo para aplicar políticas de reconversión laboral, que le permitan al Ministerio de Desarrollo Social (Mides) y el Ministerio de Trabajo poder volcar a los clasificadores al mercado laboral formal. También se busca actualizar el relevamiento que se realizó en el año 2002, y se intentará determinar la cantidad de personas que integran el núcleo familiar y los lugares de radicación de cada familia. Desde el 18 de agosto pasado, día en que comenzó el censo, y hasta la fecha unos 1.800 hurgadores se presentaron en aquellos puntos designados por la comuna para realizar este relevamiento que incluye preguntas como cuáles son los residuos que clasifica, a cuánto los vende, si recibe asistencia médica o no, nivel educativo, domicilio. En este censo la comuna espera registrar a unos 10.000 clasificadores. Los últimos datos indicaban que en Montevideo y el área metropolitana eran 9.000.Se estima que en Uruguay hay unas 30.000 personas que viven de la recolección. Para registrarse en este censo es obligatorio tener 18 años de edad, presentar cédula de identidad, carné de vacuna antitetánica y el carro que utilizan para su tarea, pintado de blanco.