Columna en Facebook del diputado Alfredo Asti (Frente Amplio), del Martes, 6 de diciembre de 2011 con el título Asti: “Más equidad tributaria”

Luego de un largo recorrido durante todo el año 2011, con presentaciones y discusiones en los ámbitos internos del F.A. (Bancada de legisladores, Mesa Política, Secretariado, coordinadoras y departamentales),  el equipo económico diseñó la forma de cumplir la propuesta programática y electoral de nuestra fuerza política de profundizar la equidad del Nuevo Sistema Tributario. El proyecto se presentó a consideración del Consejo de Ministros y Presidencia de la República en setiembre de este año. Las bases del mismo fueron presentadas por el Ministro de Economía y por el Vicepresidente Astori a la opinión pública y los integrantes de las Comisiones de Hacienda y Presupuesto (durante el trámite de la Rendición de Cuentas).

Sin embargo recién el primer día de Diciembre el proyecto llegó al Parlamento con la firma del Presidente y todos sus ministros.

No es tema de esta nota los motivos de tal demora sino la presentación y comentarios sobre las modificaciones a introducir a los dos  principales impuestos del Nuevo Sistema Tributario y otras modificaciones menores.

La propuesta sobre Rebaja del IVA que el equipo económico plasmó en el proyecto a estudio del Parlamento, tiene como objeto la eliminación de dicho impuesto para los bienes adquiridos con tarjetas de débito sociales financiadas por el Estado (MIDES, Asignaciones familiares, etc.),  mientras que el resto de la población podrá beneficiarse con una rebaja de dos puntos porcentuales de la tasa básica de ese gravamen siempre y cuando las compras fueran realizadas por transacciones electrónicas (pagos por celular, con tarjetas de crédito o débito, etc.). Esta formulación permite asegurar que la totalidad de la rebaja quedará en mano de los consumidores finales o sea aquellos a quien se quiere beneficiar y no se perderá como en otras oportunidades en la cadena de distribución y márgenes de comercialización.  También se prevé que en las compras realizadas en comercios que no discriminan el IVA (literal E y Monotributistas) el importe equivalente también será devuelto según calculo ficto.

La propuesta sobre modificaciones del IRPF consta de los siguientes puntos:

    se faculta al Poder Ejecutivo a incrementar los mínimos no imponibles del IRPF en hasta 12 (doce) Bases de Prestaciones y Contribuciones (BPC) anuales (1 BPC= $ 2.226). Se prevé ir aumentando gradualmente el Mínimo No Imponible de acuerdo al incremento del índice medio de salario para evitar que los mayores aumentos del salario real (por encima de la inflación y el valor de la BPC) obtenidos en la negociación colectiva y Consejos de Salarios,  grave con el impuesto a trabajadores que antes estaban excluidos.

    Recíprocamente se crea una categoría adicional en el referido impuesto, pasándose a gravar las rentas anuales de la Categoría Trabajo que superen las 1.380 BPC anuales  (más de 250.000 mil pesos mensuales) a una tasa del 30% (treinta por ciento), para adecuar la escala de tasas se ajusta el tramo anterior modificando el tramo que quedaría gravado a la tasa del 25% (veinticinco por ciento).

    se agregan, acompañando al ya aprobado desde enero de 2011, crédito fiscal del 6%  por los pagos de arrendamiento de casa habitación, deducciones por pagos de créditos hipotecarios o cuotas cooperativas para compra de vivienda única y permanente de los contribuyentes, con determinados límites. De esta forma se incorporan nuevos instrumentos de equidad tributaria considerando la capacidad contributiva no sólo por el ingreso sino también por los egresos vinculados a un tema fundamental en la estructura familiar como lo es la vivienda permanente.

El programa de Gobierno aprobado por el Congreso del Frente Amplio dice: “En el sistema tributario deben profundizarse los cambios manteniendo el objetivo primordial de sustituir gradualmente los impuestos al consuno por impuestos a la renta y a la riqueza. La rebaja del IVA debe  mantenerse como objetivo, que puede estar asociado también a las medidas de contención de la inflación cuando se considere necesario, así como la promoción de la equidad en el IRPF y el aliento a la inversión debe provenir de estímulos fiscales específicos con contrapartida, disminuyendo los de carácter global”.

Creemos que la propuesta presentada no solo respeta el Programa de Gobierno sino que provee las herramientas necesarias para cumplir con los objetivos ahí expresados.

En conclusión y respondiendo a las críticas que se han planteado queremos decir que es incorrecto sostener que la rebaja del IVA favorezca el consumo de los productos suntuarios. Mantener esa afirmación es desconocer que esos elementos ya están gravados adicionalmente por el Impuesto Específico Interno (IMESI) a tasas muy superiores al IVA.

Cada impuesto integrante de un sistema tributario está diseñado para obtener determinados resultados y para ello tiene determinadas características. El IVA tiene la finalidad de gravar la generalidad del consumo (por eso es tan injusto y debe tenderse a disminuirlo) y por lo tanto es conveniente tener pocas tasas y excepciones. El IMESI por el contrario tiene la finalidad de gravar con tasas diferenciales distintos bienes y distintas categorías o destino de bienes cuyo consumo se quiere estimular o desestimular. Por ejemplo las bebidas alcohólicas tienen una tasa máxima del 85%, el tabaco del 70% y algunos tipos de automotores hasta el 180% (ya se aprobó en el Proyecto de cobro unificado de Patentes la autorización al Poder Ejecutivo de un aumento de un 30% adicional de las tasa máximas para automotores). Como se puede apreciar estas tasas son muy superiores al 2% del IVA que se pretende rebajar y es este IMESI (y no lo es el IVA)  el mecanismo apropiado para diferenciar y gravar bienes o destinos  suntuarios de los mismos.

También se ha criticado que no todos los consumidores tienen tarjetas de crédito o de débito (hay emitidas casi tres millones de ellas). Recordemos que quienes ya cobran salarios y pasividades a través de los cajeros automáticos ya tienen acceso a las tarjetas de débito y esta modificación tributaria precisamente forma parte de un plan de inclusión financiera que a través de la educación financiera (que explicite ventajas y riesgos) y la facilidad de acceso a los servicios financieros se permita ampliar aún más este universo.

Por la otra parte también se critica que no todos los comercios están habilitados para operar de esta forma. Para ello el propio proyecto prevé facilidades para los comercios con el fin de adaptar la tecnología necesaria para recibir tarjetas de crédito y débito.

El uso de pagos electrónicos tiene otras ventajas, además, de limitar el circulante (por motivos de seguridad) asegura la formalización de las operaciones y con ello contribuye a una competencia más sana y a la formalización también del trabajo.

El proyecto también incluye una serie de normas que constituyen ajustes técnicos en las liquidaciones de diferentes impuestos (como otras de los del propio IVA e IRPF, Impuesto a la Renta de No Residentes, IMESI etc.), la eliminación del impuesto a los semovientes (con la correspondiente compensación  a los Gobiernos Departamentales)  y ajustes a la financiación del BPS,  debido al importante incremento de la actividad registrado en los últimos años y por consiguiente tanto de la recaudación de IVA afectado al Banco  como su propia recaudación por la mayor cantidad de puestos cotizantes y mayor eficiencia.

En síntesis el proyecto incluye modificaciones al Nuevo Sistema Tributario fundamentalmente  importantes en los dos principales impuestos de ese Sistema (IVA e IRPF) y otras menores en otros tributos, pero todas ellas encuadradas en el anunciado carácter dinámico del Sistema implementado a partir del 2007 y fundamentalmente manteniendo los equilibrios internos y externos del mismo y sus objetivos de equidad, eficiencia y estímulos a la inversión, innovación y empleo.