De origen dominicano, Julissa Reynoso pone su sello a la gestión diplomática. Enseña a bailar salsa a niños en las escuelas. La otra cara de la Administración Obama

La embajadora de Estados Unidos, Julissa Reynoso, no para de sorprender: realiza una gira por todo el Uruguay. De origen dominicano, la jefa diplomática viaja por el país, visita escuela y genera una corriente de simpatía con las distintas localidades a las que acude. Así ha dado su propia impronta a la gestión de la embajada, según informó Subrayado.

Esta vez le tocó a Minas, la capital de Lavalleja. Allí fue esperada con carteles de bienvenida.

La diplomática asistió el pasado 9 de noviembre al departamento de Salto y en la escuela 120 sorprendió al aceptar la invitación del profesor de baile.

Con buenos movimientos, propios de su condición de mujer nacida en República Dominicana, la embajadora bailó al ritmo de Celia Cruz la canción «La vida es un carnaval».