Compartimos la columna del edil nacionalista de Montevideo, Juan Curbelo titulada “Cooperativas de reciclado de basura y fideicomiso vieja propuesta, ahora sí tiene sentido”.

“Tiempo atrás, como Edil Departamental por Montevideo, presentamos una propuesta a la Intendencia de Montevideo a los efectos de contribuir a la generación de un espacio de análisis que tuviera como cometido fundamental la creación de cooperativas que nuclearan hurgadores y clasificadores de residuos.

Desde los anuncios en noviembre de 2011 por parte de la Intendencia de Montevideo del Plan Director de Limpieza no hemos dejado de escuchar las iniciativas por parte de esta de múltiples ideas acerca de la limpieza de la capital del Uruguay. Sin embargo los resultados están a la vista. Montevideo sigue siendo una ciudad sucia, con basurales endémicos y contenedores que dentro y fuera acumulan todo tipo de desperdicios.

¿Por qué hemos llegado a esta situación? Creo que son varias las causas a las cuales algunas podemos coincidir con la Intendencia de Montevideo y otras más podemos disentir.

No se puede accionar una política de salubridad y limpieza para Montevideo con un cúmulo de iniciativas sueltas sin organicidad y sistematización. No se puede desarrollar un Plan Director de Limpieza bajo la premisa de horas extras ya que cada conflicto con dicho sector nos pone ante el inminente anuncio de riesgo sanitario y decreto de esencialidad. Tampoco se puede colocar diferentes contenedores para la clasificación de distintos tipos de residuos sin la posterior evaluación y seguimiento. Hay pautas culturales que no se cambian simplemente trasmitiendo buenas intenciones. Y tampoco puede suceder que se reiteren día a día los mismos basurales endémicos a los cuales las personas se han acostumbrado a convivir, como sucede en Br. Aparicio Saravia pero que se repiten en otras zonas más. Y no evalúo los llamados “puntos verdes” que según información tenderían a desaparecer. Frente a estas pocas referencias nos encontramos ahora con la propuesta de un Plan para regularizar la actividad informal de la basura. Y nos parece excelente iniciativa. Lástima que perdimos tanto tiempo ya que en julio del 2012 presentamos una propuesta que tenía como iniciativa la concreción de cooperativas de reciclado para hurgadores y clasificadores de basura. Sin reclamar la paternidad de la idea, parece sacado de la manga que ahora la Intendencia nos presente como novedosa y excepcional tal idea.

Si una cosa ha fallado la actual Administración de la Intendencia de Montevideo es la limpieza de la ciudad. Me resisto a pensar que pasan los años y no se puede solucionar este tema.

Retomando el tema que nos convoca, decíamos que aquella propuesta que presentamos a mitad del 2012 tenía, bajo la figura del fideicomiso, una serie de objetivos que articulaban la capacidad de superación de las personas involucradas con la formalización del trabajo y también la limpieza de la ciudad. A saber:

a) Planificación, organización y ejecución en distintas zonas de Montevideo para la recolección, clasificación de residuos en sus diferentes formas, atención de situaciones de basurales endémicos, etc., de una forma más focalizada y concreta.

b) Creación de cooperativas que nucleen trabajadores es decir, una forma de organización de trabajadores que fomentaría, por ejemplo, que hurgadores, carritos, etc., pasaran al sistema formal de trabajo. Esto podría tomarse como una alternativa a varios problemas concernientes al tema basura para poder sacar del circuito de trabajo informal al sistema formal. Es una fuente de trabajo para incorporarse al mercado laboral.

c) Una contribución al medio ambiente, en tanto y cuanto se atendería en forma más concreta a problemas que necesitan de urgente solución como son los basurales endémicos permanentes en los distintos barrios de Montevideo. Es decir contribuir con una actividad sustentable que contribuya al mejoramiento del ambiente

d) La posibilidad que estas mismas cooperativas, a través de estas actividades de clasificación y transformación pudieran generar en el circuito de actividades, que empresas pudieran comprar estos productos para otro tipo de reciclajes obtención de energía, compostas, remediación de sitios contaminantes, etc.

e) La Intendencia podría prestar apoyo técnico, capacitación, uniformes, mascarillas, carretillas, soporte en momentos críticos, etc. E incluso con los recursos humanos y materiales, etc. podría coexistir con el fomento de la creación de cooperativas de recolección.

f) Fomento de actividades descentralizadas en las distintas zonas de Montevideo.

g) Capacitación y formación.

Pues bien, es posible hacerlo y fomentarlo. Voluntad política debe estar presente. Y sobre todo tener la humildad de reconocer que aunque provengamos de partidos de la oposición no se está solamente para el control de la gestión sino también con capacidad de proponer. Y no por eso es malo, descartable o directamente imposible como muchas veces se responde. Si porque la propuesta viene de otro partido y es buena la descartamos, quien pierde es Montevideo además de una pobre actitud demagógica y poco sensible. Quiero creer que no son los cánones de esta Administración.

No vayamos a ideas sueltas y sin criterio de organicidad. Planteemos ideas en el marco de un sistema que abarque una serie de iniciativas y acciones que redunden en exitosas políticas que hasta el momento no han dado fruto.

Apoyamos pues esta propuesta que viene de la Intendencia de Montevideo sin dejar de reconocer que habiéndola planteado por este representante en el mes de julio 2012, hemos dejado pasar unos buenos meses”.