Luego de un año de intenso trabajo, el “Bonanza”, el velero de regatas de Clase de la Armada Nacional, volvió al puerto de Montevideo renovado y listo para la alta competencia, donde se lo notará más rápido, cómodo y seguro. Las refacciones, que implicaron una inversión superior a los US$ 250.000, fueron financiadas por Buquebus y realizadas por el equipo de armadores de la empresa.

“La confraternidad es habitual entre los que nos gusta navegar. La realidad es que el ‘Bonanza’ estaba en condiciones realmente muy malas y nosotros contamos con la tecnología como para dejarlo como nuevo, y así se hizo. Inclusive con un estándar superior al utilizado en su construcción original”, comentó el presidente de Buquebus, Juan Carlos López Mena.

En este sentido, el empresario indicó que el velero no sólo recuperó su apariencia, sino que sus sistemas de navegación fueron modernizados y su peso se redujo en unos 500 kilos, al sustituirse partes de aluminio por piezas de fibra de carbono.

Asimismo, López Mena explicó que con la reparación del velero buscó reconocer los aportes de la Armada Nacional a la sociedad uruguaya. “La Armada es una escuela que forma recursos humanos que le hacen mucho bien a Uruguay en general y en particular a Buquebus, donde empleamos a cientos de personas que se capacitaron en esa institución”, señaló.

En tanto, el comandante del Bonanza, el Teniente de Navío, Fernando Ansorena, destacó que la contribución de Buquebus asegurará “el adiestramiento en el mar a más de 20 generaciones de la Armada Nacional”.

Ansorena dijo también que “el equipo de trabajo y la calidad técnica que tiene Buquebus son únicos en Uruguay y en la región”, por lo que el “Bonanza” volverá a la competencia “para dar pelea a primer nivel”.

Por otro lado, López Mena agradeció a la Armada por la colaboración que está brindando para la botadura del “Doña Francisca”, un espectacular velero de alta gama que el empresario está construyendo en Uruguay.