El MIEM y Uruguay XXI organizaron el seminario Modelos de gestión, intercooperativismo e internacionalización, como parte de las acciones para cumplir las metas del acuerdo suscripto entre el ministerio y la Corporación Mondragón de España. El aprendizaje de las mejores prácticas internacionales permite aumentar el éxito de las cooperativas uruguayas, dijo Kreimerman.

El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM) y Uruguay XXI organizaron el seminario Modelos de gestión, intercooperativismo e internacionalización – Experiencia de la delegación uruguaya en Mondragón 2014, que se desarrolló este martes en la sala de actos de la Torre Ejecutiva.

En la apertura participaron el ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman; y el director ejecutivo de Uruguay XXI, Andrés Peláez.

El seminario se enmarcó en el convenio firmado en 2014 entre ambas instituciones, cuyo objetivo fue implementar las acciones necesarias para cumplir las metas del acuerdo suscripto entre el MIEM y la Corporación Mondragón del País Vasco, España, en 2013.

En el seminario se compartió la experiencia de la delegación uruguaya que concurrió a Mondragón en junio de 2014, y se realizó una videoconferencia con Juan Izeta, integrante de esa corporación, quien desarrolló diversos temas de interés para los cooperativistas. Además, se analizaron los modelos de gestión y dinámica de las cooperativas de producción en Uruguay, con la participación de la Cooperativa de Trabajadores Cerámicos (CTC) y Cotraydi.

En el seminario también participaron el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Instituto Nacional del Cooperativismo (Inacoop), que coorganizaron y apoyaron el evento.

Sector que crece

En la apertura, el ministro Kreimerman destacó el fructífero trabajo conjunto con Uruguay XXI en pos de la transformación de la estructura productiva del país, así como el que se desarrolla con la Cancillería e Inacoop.

El jerarca recordó una frase de Ernesto Che Guevara –referida a otra temática-, quien dijo que del sistema capitalista hay que tomar los elementos de gestión correctos, aunque no hay que hacer lo mismo con los elementos ideológicos incorrectos. «Los elementos de gestión correctos, las mejores prácticas que puedan existir, se buscan en el mundo», dijo Kreimerman, en referencia al acuerdo suscripto con la Corporación Mondragón, la mayor cooperativa de España y la empresa más grande del País Vasco.

El ministro recordó que el movimiento cooperativo ha crecido en los últimos años y hoy abarca más empresas e integrantes. Se estima que alcanza o supera el 3 % del Producto Bruto Interno y abarca a los sectores industrial, comercial, agropecuario y de servicios.

También dijo que en este período han crecido los apoyos al sector cooperativo, en financiamiento, capacitación e institucionalidad (con la creación de institutos creados por ley). Entre ellos se incluyen varios llamados y concursos que el MIEM realiza anualmente.

Sin embargo, Kreimerman afirmó que «el aprendizaje lleva su tiempo cuando se hace por sí solo» y que el porcentaje de éxitos y los tiempos en que se logran mejoran si se aprende de las mejores prácticas internacionales. Por eso la importancia del acuerdo firmado con la Corporación Mondragón para conocer sus aspectos organizativos, culturales y estratégicos, todos ellos profundamente entrelazados, con «zonas de sinergias y contradicciones» que es preciso comprender.

Este aprendizaje y su transmisión a la interna del país –a través, por ejemplo, de este seminario- resultan, por ende, fundamentales, subrayó Kreimerman.

El ministro cerró su participación afirmando que los apoyos al sector desde el Gobierno continuarán, incluyendo el estímulo de la internacionalización de la mano de Uruguay XXI. «Es un tema al cual todos queremos impulsar», finalizó.

Por su parte, Peláez manifestó la importancia que para Uruguay XXI tiene involucrarse en un área nueva, lo que «refleja un cambio de algunos lineamientos estratégicos del instituto», bajo la premisa de que «todos los emprendimientos, en la medida que tienen una potencialidad exportadora», son parte de su política.

El director ejecutivo de Uruguay XXI agregó que «no hay nada más revolucionario que la eficiencia», en el sentido «humano, y no económico tradicional, de ganancia material». En el cooperativismo «se prioriza la calidad humana de las personas», afirmó. Por ese motivo, es necesario «apostar a la condición humana de la gestión», y no solo «exportar por exportar». Para ello, el instituto es «una herramienta del Gobierno», que tiene a los derechos humanos como un eje transversal.

Peláez reconoció el trabajo con el MIEM, así como con Cancillería y el ámbito social-educativo. «Todos los actores vinculados al tema de la economía social y solidaria participaron, participan y nos comprometemos a que seguirán participando», aseguró. Este sector que se autogestiona, donde las personas «se hacen dueñas de su destino» y que tiene sus «valores propios», a su vez compite en un mundo «que tiene sus reglas», y es en ese sentido que el Gobierno ofrece su apoyo, resumió el jerarca.