“Este ha sido un balneario de la clase media uruguaya, le tengo amor porque tiene mucha humildad de la gente que trabaja y eso es representativo de cómo vive el pueblo uruguayo”, sostuvo el Presidente Mujica en la inauguración de las obras en la rambla de Piriápolis. El Mandatario destacó que el Estado invirtió 100 millones de pesos para rejuvenecer la rambla de un balneario hermoso y con mucho futuro.

El Presidente José Mujica reconoció, durante la inauguración de las obras en la rambla de Piriápolis, la inversión inmobiliaria que hay a lo largo de toda la costa uruguaya y en particular en Maldonado, los ingresos generados por el turismo y los capitales argentinos que generaron puestos de trabajo para los uruguayos.

“Este ha sido un balneario de la clase media uruguaya. Le tengo amor porque no es un balneario donde se despilfarre la plata sino que tiene mucha humildad de la gente que trabaja y eso es representativo de cómo vive el pueblo uruguayo”, sostuvo el  Mandatario. 

“Es una tradición republicana que se vive al caminar por estas calles y callecitas y subir a un cerro, nadie es más que nadie, somos lo que somos”, subrayó.

En otro tramo de su discurso, Mujica señaló que “uno siempre tiene que luchar por los intereses del país y sentarse en cualquier mesa, inclusive en la de los señores poderosos, porque puede ser importante para el trabajo de mucha gente. Ahí uno debe saber que es un invitado y que no pertenece a esa mesa sino a la de la mayoría del pueblo uruguayo”.

Llamó a no dividir a la sociedad entre pobres y ricos. “Hay que tener un sentido trascendente dando respeto a las mayorías del país, que a la larga son las que deben marcar la línea y dar la gobernanza”.

“Nuestros funcionarios son elegidos para administrar pero por más importante que sea el lugar que ocupen no son más que nadie y tenemos que mantener ese sentido democrático parejo. Nos llamamos por el nombre y no nos creemos unos fenómenos. Nos sentimos identificados con el ser más común y corriente que es el único que perdura a lo largo del tiempo”, reflexionó.

En los tramos finales de su discurso, que fue presenciado por centenares de piriapolenses y turistas, el Mandatario aseveró que “el Estado metió plata en pila acá, cerca de 100 millones de pesos. El Estado no inventa la plata sino el trabajo de los uruguayos que son los que consumen y pagan impuestos”.  

“Esta es una inversión hecha para rejuvenecer esta vieja ciudad balnearia que es hermosa y tiene mucho, mucho futuro”, enfatizó.

Mujica estuvo acompañado por la senadora Lucía Topolansky, del ministro de Educación y Cultura, Ricardo Ehrlich, del subsecretario de Turismo y Deporte (MINTURD), Antonio Carámbula, del representante de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto (OPP), Marcos Otheguy, de la intendenta de Maldonado, Susana Hernández, y del alcalde, Mario Invernizzi.

Espacio de convivencia ciudadana
El proyecto que ya fue habilitado incluyó la ampliación de los pavimentos peatonales y las aceras, se redujo la calzada a dos sendas, se aumentaron los espacios verdes y se incorporó una ciclovía. También se colocaron bancos cuyo diseño imita la ondulación de los cerros. Las obras se extienden en el tramo de rambla comprendido entre los hoteles Colón y Argentino.

En tanto, Carámbula recordó que el turismo ha sido una de las actividades responsables para explicar el crecimiento económico sostenido de los últimos años, captando divisas de los servicios turísticos e inversión extranjera directa. Esto —describió— mejoró la calidad de vida de los uruguayos con la creación de 100.000 puestos de trabajo directos y un número similar de indirectos.

Dijo que Piriápolis se merecía la recuperación de su rambla que, tradicionalmente, ha sido un espacio de encuentro democrático, inclusivo y de convivencia para los miles de turistas que llegan todos los años y para los vecinos de la ciudad al inicio de la temporada.

Decisión política del Gobierno
Por su parte, Otheguy manifestó que la nueva rambla de Piriápolis se enmarca en las políticas de descentralización impulsadas por el Gobierno nacional.

“Para que estas cosas sucedan se tienen que combinar: una comunidad organizada que participe y quiera a su lugar y el entorno con una institucionalidad local y consolidada. Además, un gobierno de cercanía, de contacto con la sociedad, un Estado con presencia en todo el territorio nacional y mucha decisión política como tuvo este Gobierno”, aseguró.

Al finalizar la parte oratoria, Invernizzi se dirigió con afecto al Presidente Mujica. “Somos una ciudad sin rejas, sin muros perimetrales, abierta al mundo, que no tiene llave, entonces no podemos entregar las llaves de la ciudad. Si podemos entregar un pedazo del corazón de todos nosotros, un pedazo de nuestra rambla”, y le obsequió un adoquín.
Fuente: Presidencia.gub.uy