alberto díazCon críticas a la política proteccionista argentina y a la falta de regulación en materia de costos de navegación, empresarios de Uruguay, Paraguay y Bolivia señalaron la necesidad de adoptar medidas comunes a nivel regional para que la Hidrovía Paraguay-Paraná se convierta en una ruta de salida eficiente para la producción.

En el marco de la Conferencia Urupabol Empresarial, celebrada en la sede de la Cámara de Industrias del Uruguay (CIU), representantes del empresariado de los tres países se reunieron con autoridades de la Administración Nacional de Puertos (ANP) y de la Dirección Nacional de Aduanas (DNA).

El presidente del bloque, Eduardo Felippo, aludió a las trabas argentinas y señaló que “no es casual que cuando vamos a hacer algo aparezcan los problemas. Es muy importante que Paraguay, Bolivia y Uruguay nos pongamos de acuerdo, porque la situación que hoy tenemos no es casualidad. No pretendemos arreglar el mundo, solo queremos que nos dejen navegar”.

En una fuerte defensa del “concepto de integración”, el presidente de la Administración Nacional de Puertos (ANP), Alberto Díaz, coincidió en la preocupación planteada y apuntó que un aspecto importante pasa por regular los costos sobre el uso del canal. “Siempre se corre el riesgo de que a alguien se le ocurra cobrar de más”, expresó, sin nombrar en forma directa a Argentina, que en cambio sí fue mencionada por los demás participantes.

En la misma línea, el presidente del Centro de Navegación (Cennave), Alejandro González, defendió las tarifas de los puertos uruguayos y recordó las medidas adoptadas para reducir costos operativos. El jerarca cuestión que “se diga que Montevideo está caro”, y llamó a “ver el contexto”. En ese sentido, recordó que se acordaron exoneraciones para barcos de bandera paraguaya, se cambió el reglamento de prácticos, generando una nueva zona de fondeo. “Todo se viene haciendo para mejorar la operativa y ahorrar dinero para los armadores”, argumentó.

Por su parte, el director de Aduanas, Enrique Canon, informó que se está desarrollando el precintado electrónico de contenedores para seguir su recorrido por el país en forma satelital. No obstante, aclaró que la negativa argentina de habilitar empresas uruguayas impide el desarrollo del sistema más allá de las fronteras, lo que revela un inconveniente adicional generado por el gobierno del vecino país.

En un informe técnico, el ingeniero Walter Sánchez, representante de CSI Ingenieros, advirtió que la hidrovía “no necesita mega obras o grandes inversiones. Alcanza con hacer los estudios adecuados para potenciar las inversiones que ya se están haciendo”.

La reunión fue clausurada por el escribano Ricardo Scaglia, vicepresidente de Urupabol Empresarial, quien convocó a seguir trabajando para convertir a la hidrovía en la “oportunidad de negocios que nuestros países necesitan”.

Del encuentro participaron el ex canciller Sergio Abreu; Jan Van Hoogstraten y Alejandro Gorostidi, representantes de la Comisión Permanente de Transporte de la Cuenca del Plata; Wilfredo Rojo, presidente de la Cámara de Exportadores de Santa Cruz (Bolivia); Juan Carlos Muñoz Mena, delegado del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos de Paraguay, y el subsecretario de Transporte y Obras Públicas, Jorge Setelich.

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