Tras la firma del convenio el viernes 13 de enero, la empresa Silexis Uruguay SAS instalará su planta de fabricación de medidores inteligentes eléctricos, agua y gas en Paysandú, incorporando mano de obra para el proceso productivo. “Estos empresarios están haciendo un acto de confianza, y la confianza se genera, se construye y se honra con acciones de los dos lados”, dijo el intendente Nicolás Olivera.

En la exPaylana

Desde hace un tiempo, la Intendencia Departamental viene trabajando con el estudio de los sanduceros Vuille-Lafourcade, quienes trabajan en Argentina en la captación de inversores para que se radiquen en nuestro país, lo que “habla de un sentido de pertenencia para promocionar el país y nuestro departamento”, destacó Olivera.

En uno de los viajes del intendente a Buenos Aires y a Córdoba, mantuvo contactos con el empresario Hermann Karsten, quien les contó sobre el proyecto que tenían en Argentina, desarrollando tecnología, laboratorios y procesos de fabricación y montaje de medidores inteligentes de energía, de gas y de agua.

Allí, el intendente comenzó las conversaciones para que se instalen en Paysandú, y esta concreción se dio por varios motivos. Uno de ellos es porque “es gente que cree en Uruguay y en poder radicar su proceso productivo que tiene mucho valor agregado desde lo intelectual, tecnológico y del desarrollo”. La llegada de la empresa “genera inversión, puestos de trabajo” dado que desde Paysandú se van a fabricar medidores inteligentes para todo el mundo.

En el Salón Rojo se firmó en la mañana de hoy un convenio y contrato de arrendamiento para tener disponibilidad de cerca de 1.390 metros cuadrados de un sector de la explanta de Paylana, en donde será su planta de montaje y fabricación de los medidores inteligentes.

Importante inversión

“Cuando hablamos del Paysandú For Export era esto, salir todos los días con las valijas. Hicimos muchos viajes, de varios no nos trajimos nada, pero dejamos la semilla plantada y todos los días la regamos para que crezca, llamamos, hablamos, insistimos, pero todo pasa por el factor de la confianza”, indicó Olivera.

El intendente destacó que “estos empresarios están haciendo un acto de confianza, y la confianza se genera, se construye y se honra con acciones de los dos lados. Ellos podrían haber aterrizado en Montevideo, Punta del Este o Paraguay, pero decidieron elegir Paysandú”.

En este sentido, Olivera indicó que se invertirán tres millones de dólares, el primer millón será en el correr de este año, en tanto que los otros dos millones se irán complementando a medida que se agreguen otras líneas de montaje.

La llegada de Silexis Uruguay se da luego del anuncio de hace algunos días de la firma del decreto del presidente de la República, Luis Lacalle Pou, aprobando una iniciativa privada para un emprendimiento de hotel y casino.

Empresa familiar

Karsten explicó que son una empresa de tecnología familiar formada por hermanos y sus hijos, creada en Argentina, siendo hijos y nietos de inmigrantes. “Siempre hicimos las cosas pensando que para crecer nosotros, tenía que crecer toda la comunidad que nos rodeaba, y así nos fuimos expandiendo y diversificando”.

La principal actividad de la empresa continúa siendo la modernización, el fortalecimiento y la gestión tributaria de los Estados, según indicó. Asimismo, trabajan con actividades productivas industriales, y en la generación de genética en ganadería.

“Un día descubrí en Córdoba un ingeniero que tenía en el garaje de su casa un pequeño laboratorio donde fabricaba una de las cinco tecnologías que hay registrada en el mundo de medidores inteligentes”, recordó. “Me llevó casi dos años convencerlo para comenzar una fábrica, y formamos Silexis Argentina”.

Los medidores

Los medidores que fabrica la empresa son capaces de medir cualquier pulsometro que esté por debajo de él, ya sea de agua, de gas o eléctrico. Concentra eso en un medidor, lo pasa por el propio cable de energía eléctrica a un concentrador y allí por wifi o por fibra óptima se enlaza a una base de datos central que no solamente realiza la lectura, sino también la administración de energía.

Karsten indicó que no les fue sencillo para obtener los permisos debido a que “nos enfrentamos a una burocracia infernal”. “No podía lograr la certificación en Argentina por la burocracia, la mala voluntad, los intereses creados sobre la importación que no se fabrican en Argentina”.

Fue allí que debieron viajar a Alemania en donde el principal certificador de medidores del mundo les dio las herramientas para poder lograrlo. Tras pasar por varias instancias y laboratorios, lograron la certificación pero “Argentina ya había pasado la mitad del tobogán cuesta abajo en el que venía y teníamos dificultades para conseguir insumos”, por lo que no podían lograr acuerdos con los grandes proveedores de microcomponentes.

“Un país amigable”

Fue allí que decidieron emigrar debido a la imposibilidad de poder crecer y acceder a los mercados internacionales. “Pensamos en Paraguay, un país cercano, miramos a Chile que nos abría el mercado alternativo, y en todos los lugares nos pasaba que nos resultaba difícil bajarnos del barco de la migración porque no se encontraban caras amigables”, indicó el empresario.

“Uruguay es un país amigable con quienes tenemos raíces culturales, tomamos contacto con Diego (Vuille) y Nicolás, y nos demostraron que si emprendíamos el viaje íbamos a tener una mano tendida, ese amigo que te espera con los brazos abiertos para que puedas dar lo mejor de uno mismo”.

Fue allí que estudiaron las posibilidades, se reunieron con UTE y Salto Grande, que “nos allanaron el camino que a nosotros nos llevó cuatro años de mendigar certificaciones en Argentina”. “Uruguay nos abrió las puertas para que podamos convertir el medidor en un producto que tenga la marca de ‘Industria Uruguaya’”.

Karsten indicó además que el equipamiento ya está comprado y la llegada a nuestra ciudad será en los próximos 90 días. Allí se emplearán un mínimo de 30 personas en la primera etapa, en la segunda se incorporarán 30 más y en la tercera ingresarían 60 personas más, llegando a un total de 120 empleos directos.

Un polo de tecnología

“Nicolás (Olivera) nos tendió la mano y del único modo de retribuirle es decir que no seremos solamente fábrica, sino que seremos un polo de tecnología”, remarcó el empresario argentino.

“Queremos revivir ese Paysandú pujante que supo ser, que hagamos como el ave fénix, que de la mano de ustedes queremos prender las luces de esa gigantesca fábrica textil y hacer camino en conjunto al futuro para llegar al mundo con la marca Industria Uruguaya, fabricada en Paysandú”.

Fuente Imagen: Intendencia de Paysandú.