El Subsecretario del Ministerio de Salud Pública, José Luis Satdjian reveló que desde octubre de 2021 hemos detectado 3.649 intentos de autoeliminación, 70 % mujeres y 30 % hombres.

Sus apreciaciones fueron formuladas el pasado jueves 9 de noviembre en la Comisión Especial de Población y Desarrollo de la Cámara de Representantes al analizar el proyecto por el cual se declara de interés el tratamiento integral y rehabilitación de las personas con uso problemático de drogas imputadas por delitos relacionados o no al mismo.

“Con respecto a los intentos de autoeliminación y a los suicidios en nuestro país, vale la pena recordar que, lamentablemente, hace treinta años que la tendencia es al aumento. Tuvieron un pico en el año 2002 y descendieron en 2003, pero la tendencia en los últimos treinta años es de aumento”, dijo Satdjian.

Puntualizó que “desde el año 2021 -posterior a la pandemia- venimos elaborando acciones y planes concretos para la prevención y la atención de las personas que realizan intentos de autoeliminación, así como de los familiares supervivientes de personas que han decidido quitarse la vida. En ese sentido, en el Área en Salud Mental, en conjunto con otras divisiones del Ministerio, establecimos una serie de acciones para realizar el seguimiento de los intentos de autoeliminación”.

Recordó que “previamente a ese plan existía la Ficha de Registro Obligatorio (FRO), que era un formulario en papel en las puertas de emergencia de todos los prestadores del país. Lo que hicimos fue aplicar herramientas tecnológicas a la FRO y establecer un sistema operativo en cada puerta de emergencia mediante el cual los profesionales de la salud ingresan los datos de las personas que realizan intentos de autoeliminación”.

Aclaró que “cuando se realiza un intento, por lo general, la persona es trasladada a una puerta de emergencia por la gravedad del hecho. Entonces, de esa manera, el Ministerio tiene información en tiempo real sobre los intentos que se realizan en todos los puntos del país en un momento. Tenemos información sobre las personas, sobre los lugares y sobre distintos aspectos que son relevantes para poder tomar decisiones”.

A modo informativo –señaló- que “eso se implementó en octubre de 2021. Hasta el momento, hemos detectado 3.649 intentos de autoeliminación, de los cuales el 70 % son de mujeres y el 30 %, de hombres. Eso se da a la inversa de la situación del suicidio en nuestro país ya que, por el método empleado, el intento se da en mayor medida en mujeres que en hombres”.

Luego de tener la información -que nos llega en tiempo real-, “hicimos un seguimiento de esas personas. En este punto, no innovamos en nada ya que desde 2018, por resolución del Ministerio de Salud Pública, se establece que la persona que realiza un intento de autoeliminación debe tener una asistencia psiquiátrica en no más de seis días de haber realizado el intento”. Por lo tanto, “estamos haciendo el seguimiento de que la persona tenga la asistencia que le corresponde por normativa. Lo que a veces sucedía anteriormente era que, cuando una persona hacía un intento, era trasladada a una puerta de emergencia que no era de su prestador”.

En consecuencia, dijo el subsecretario del MSP, “el prestador al cual la persona estaba afiliada no tenía conocimiento de que esa persona había realizado un intento. Ahora, se avisa en el día al prestador del que la persona es socia, para que haga el seguimiento que corresponde. El Ministerio realiza el seguimiento con la fuerza de rastreo que teníamos para el covid 19”.

“Estamos haciendo el rastreo de los intentos de autoeliminación y el seguimiento de que tengan la atención correspondiente. A veces, detectamos casos en los que no se da la atención correspondiente”, manifestó.

Dejó en claro que “esto puede obedecer a varios motivos. Uno, es que la persona continúe internada después de seis días debido a la magnitud del intento de autoeliminación. Otro, es que la persona ya esté en tratamiento de manera particular o en su prestador, con lo cual ya está en seguimiento. Y otro motivo es que, por distintas razones, no se dé atención al sexto día, pero sí al séptimo o al octavo”.

Según Satdjian, “cuando, definitivamente, no se da la atención correspondiente, se crea un expediente y se pasa al área de fiscalización del Ministerio de Salud Pública. Debo decir que ya se han aplicado sanciones a los prestadores que no han realizado este seguimiento. Por lo tanto, estamos prácticamente arriba de la situación para que la persona tenga la contención debida desde el prestador de asistencia”.

Asimismo, “me gustaría dejar sentado en la versión taquigráfica que, cuando hablamos de suicidio y de intentos de autoeliminación, la línea de prevención de ASSE es el 0800 0767. Ya que las versiones taquigráficas a veces son recogidas por medios de prensa y por otros actores de la comunidad, nos parece importante dejar en claro que el teléfono de asistencia a todas las personas del país durante las veinticuatro horas es el 0800 0767”.

El jerarca mencionó también “al Centro Martínez Visca de la Comisión Honoraria de Apoyo a la Salud Mental. Anteriormente, se daba la particularidad de que el Patronato del Psicópata era financiado con fondos que provenían de un porcentaje de las contrataciones de ASSE en la Comisión de dicho Patronato. Eso ha venido descendiendo porque la cantidad de trabajadores de las colonias ha ido bajando, como ustedes saben, a raíz de la Ley de Salud Mental. Esto generó una situación de desfinanciamiento de la Comisión”.

No obstante, “gracias a la inclusión y aprobación de algunos artículos en la reciente rendición de cuentas, se da sostenibilidad y sustentabilidad a la nueva Comisión, para que pueda llevar adelante las distintas propuestas. El Centro Martínez Visca se dedica a la rehabilitación y tratamiento de personas con problemas de salud mental. Tiene buenos resultados; allí se realiza un buen trabajo”.

Como buena noticia es que “a partir de ahora va a poder incrementar esa atención. Atiende, particularmente, a pacientes de ASSE, y lo hace de acuerdo a las distintas derivaciones. Entonces, se transformó una institución, que creíamos que tenía un nombre por demás estigmatizante y que había que mejorar, y se le da un presupuesto para la sostenibilidad hacia el futuro de las distintas acciones que lleva adelante”.

Fuente Imagen: Unicef.