Un total de 8 emprendimientos en el departamento de Salto han sido beneficiados en primera instancia con préstamos otorgados a través del denominado «Fondo Raúl Sendic» que se nutre con los aportes que realizan los legisladores del MPP mediante descuentos que hacen a sus sueldos.

En los últimos meses se trabajó en la recepción de solicitudes y propuestas, tras lo cual se desarrolló la instancia de selección de solicitudes, otorgándose el beneficio a 8 proyectos aprobados uno de los cuales COFUESA (Cooperativa Fuente Salto, de los ex trabajadores de Urreta) percibió una suma superior por las características del emprendimiento.

«La mayoría de los proyectos presentados en Salto están vinculados a la horticultura», dijo Jorge Farías coordinador local del Fondo Raúl Sendic. «Nos fue imposible atender a todos porque los costos excedían ampliamente nuestras posibilidades de fondos», agregó. «Solucionamos los más urgentes, como era el caso de aquellos que tenían la tierra preparada y necesitaban el fertilizante, la semilla y logramos atender algunos requerimientos de nylon para los invernáculos para poder trabajar».

Farías agregó que la máquinaria adquirida a través del Fondo queda a nombre del Fondo hasta que la termine de pagar, que es cuando pasa a propiedad del solicitante del crédito.

Sin embargo, el Fondo Raul Sendic destinó 3 mil dólares, una cifra notoriamente elevada para la organización partidaria crediticia, para solventar la refundación de la vieja planta procesadora de jugos Urreta, de Salto. «De todas formas es un aporte mínimo si tenemos en cuenta lo que significa ese emprendimiento para Salto y aún para el país», dijo Farías. Los trabajadores de la antigua Urreta hoy formaron una cooperativa (COFUESA) y ya saldaron las cuentas que los ex empresarios mantenían desde hace tiempo con el Estado.

La inversión de 3 mil dólares se va a centrar en la compra de envases en un volúmen necesario como para hacer frente a la próxima temporada de verano, además de permitirles la adquisición del cliché con el que se imprime las etiquetas, que tiene un costo de 600 dólares, aproximadamente.