La provincia de Entre Ríos transformó el ley la prohibición de vender madera a Uruguay. La norma, que ya había sido aprobada por los diputados provinciales, recibió el visto bueno del Senado, tras una petición del gobernador de Entre Ríos, Jorge Busti, para acelerar su sanción.

La iniciativa aprobada prohíbe la exportación desde Entre Ríos a Uruguay de rollizos o chips de eucalipto sin previo procesamiento o una transformación que les dé valor agregado.

La medida, que fue propuesta por la Asamblea Ambiental de la ciudad entrerriana de Gualeguaychú, exceptúa de esta restricción a la madera que se destine a las plantas industriales de otros países.

En diciembre pasado, cuando fue presentado el proyecto, el canciller uruguayo, Reinaldo Gargano, tachó de «descabellada» a la iniciativa.

Los vecinos de Gualeguaychú mantienen bloqueado desde el pasado 20 de noviembre el puente hacia la uruguaya Fray Bentos, donde la finlandesa Botnia construye una planta papelera a la vera del río Uruguay, límite natural entre los dos países.

Aguas abajo, la española Ence planea levantar una planta similar.

Argentina ha recurrido a la Corte Internacional de Justicia de la Haya por la decisión de Uruguay de autorizar unilateralmente las plantas afectando un recurso fluvial que es de administración compartida.

Uruguay ha recurrido a igual instancia por los bloqueos de los pasos fronterizos.
El año pasado, Entre Ríos exportó madera por valor de 53 millones de dólares, de los cuales sólo el 2,5 por ciento fue de madera en bruto.

El gobierno de la provincia de Entre Ríos promoverá que la prohibición de comercializar madera a Uruguay lo establezcan los demás gobiernos provinciales de la República Argentina.