El Comisionado para el Sistema Carcelario, doctor Álvaro Garcé constató la presencia de en la cárcel de Maldonado de «una interna en los calabozos de disciplina y seguridad conjuntamente con internos de sexo masculino» y si bien no compartía la celda con los reclusos, esa situación contraviene las Reglas Mínimas de Naciones Unidas para el Trato de Personas Privadas de Libertad, aunque valoró que la medida se implementó para «preservar efectivamente la vida y la integridad de la interna».

Las consideraciones de Garcé fueron efectuadas luego de aclarar el alcance de hechos ocurridos en el centro de Reclusión «Las Rosas» en Maldonado el miércoles 14 de enero, y documentadas en un informe a la Comisión Permanente del Poder Legislativo.

En torno a las recomendaciones al Ministerio del Interior y a la Jefatura de Policía de Maldonado, Garcé sostuvo que «al momento de la visita, constatamos la presencia de una interna en los calabozos de disciplina y seguridad (sector 6) conjuntamente con internos de sexo masculino. Si bien aquélla no compartía la celda con reclusos, la presencia en un mismo celdario de personas privadas de libertad de distinto sexo contraviene en forma expresa lo dispuesto por el decreto ley 14.470 (artículo 25) y por las Reglas Mínimas de Naciones Unidas para el Trato de Personas Privadas de Libertad (regla 8.a)».

El jerarca señaló que «consultadas al respecto las autoridades del establecimiento, explicaron que la permanencia de la interna en el pabellón femenino habría significado un grave riesgo para su integridad física (en virtud de problemas de convivencia con otras reclusas) y que, careciendo de otra alternativa para ubicarla dentro del establecimiento, hasta que se concretara su realojamiento en la cárcel femenina de Montevideo prefirieron destinarla en forma transitoria al sector de calabozos».

Asimismo, señala Garcé, «si bien es de recibo el propósito de la Dirección del Establecimiento de preservar efectivamente la vida y la integridad de la interna, no puede convalidarse la práctica de alojar a internos e internas de distinto sexo en un mismo sector, aun en celdas contiguas».

Por tanto, «en su mérito, he recomendado al Ministerio del Interior la implementación de un mecanismo ágil de resolución y coordinación de los traslados cuando éstos deban realizarse desde órbitas distintas (Dirección Nacional de Cárceles y Jefaturas de Policía Departamentales), especialmente en aquéllas situaciones en las que, como la narrada en el caso, se encuentre en riesgo la vida o la integridad de personas privadas de libertad».

Garcé agregó recomendó a la Jefatura de Policía de Maldonado que, en aquellas ocasiones en que sea imposible o ampliamente riesgosa la permanencia de internos o internas en Las Rosas en forma cautelar se les destine a otras dependencias policiales en el departamento a la espera de la coordinación para el correspondiente traslado hacia otros establecimientos».