Cinco pacientes psiquiátricos que estaban internados en una sala de seguridad del Hospital Vilardebó se escaparon esta tarde de miércoles 18 de febrero no sin antes tomar de rehén a un guardia que los custodiaba.

Los fugados se encontraban en la zona de máxima seguridad por disposición judicial y aprovecharon un descuido para fugarse.

«Por suerte no resultó herido ninguno de los guardias de seguridad ni nadie del personal de enfermería y tampoco ninguno de los pacientes», expresó a radio Montecarlo Roberto Santero, encargado de ese sector del nosocomio.

El funcionario destacó que se trata de cinco «pacientes judiciales» que estaban internados por distintas causas. «Desde el punto de vista médico psiquiátrico uno solo de ellos estaba descompensado, los demás estaban en situación de alta médica pero no judicial», agregó.

Santero indicó que los fugados aprovecharon que se abrió la puerta de la sala cuando otro paciente iba a entrar a la misma tras ser revisado por un médico.

Locos pero no tontos.