En conjunto con la Intendencia de Montevideo, el Club de Golf del Uruguay dictó clases gratuitas de natación en Playa Ramírez a niños de diferentes instituciones sociales, a través del programa “Disfrutá, aprendé en el agua”.

Es el segundo año consecutivo que el Club emprende acciones para fomentar la actividad deportiva de los más pequeños con un fin social. Las mismas se desarrollaron entre el 4 de enero y el 24 de febrero y un total de 80 chicos de entre 8 y 16 años participaron de las clases de natación y recreación.

Un equipo de profesores de educación física del Club fue el encargado de dictar las clases todos los martes y jueves a niños en situación de vulnerabilidad social con el fin de incentivar el deporte y nuevos ámbitos de sociabilización.

Niños, niñas, jóvenes e inclusos madres de las organizaciones San Vicente de Paul, Club de niños Hormiguitas, Club Acuarela, la organización Gustavo Volpe, la Clínica Asencio, Casacha, Caprodi Puerto, y otras instituciones, que se acercaron a través de INAU, pudieron disfrutar de las jornadas al aire libre gracias a un acuerdo alcanzado entre el Club de Golf y la Intendencia capitalina.

Una vez finalizadas las clases de verano, los niños manifestaron su gran alegría y satisfacción. “Es la primera vez que no me rechazan y me dicen que avanzo”, dijo uno de los participantes, mientras otro niño señaló: “es lo mejor que me pasó en mi vida”.

“Para nosotros fue muy gratificante observar el avance y progreso de los chicos, algunos de ellos lo vivían como un premio, al haber cumplido con otras responsabilidades. Sentimos que logramos los objetivos previstos, la familiarización en el manejo del agua, en un espacio libre como lo es, la playa; así cómo una excelente integración entre los chicos que provenían de diferentes contextos, los educadores y profesores que participamos del programa. Fue una experiencia muy enriquecedora para todos, conformamos un muy buen equipo de trabajo  y nos gustaría volver a repetir esta experiencia”, señaló uno de los docentes.

Por su parte, la educadora social del INAU, María Elena Rosas declaró que “Fue muy gratificante observar sonrisas de todos los que tuvieron acceso a esta posibilidad. Afirmo, como educadora social, desde mi humilde experiencia, que este tipo de propuestas son inolvidables y tienen gran valor para la comunidad y fortalecen el desarrollo y la integración social”.

De esta manera, una vez más, el Club de Golf emprende acciones de responsabilidad social a beneficio de la comunidad con el objetivo de fortalecer los valores éticos y procurar una vida más humana.