Dentro del programa de Sustentabilidad Corporativa de HSBC se trata de apoyar a instituciones que contribuyan con la educación de niños y adolescentes de Uruguay. Es por eso que el Liceo Jubilar Juan Pablo II recibió de HSBC, a principio de año, una donación de pupitres para tercer año de Secundaria y, recientemente, entregó mantas y alimentos con motivo del inicio del invierno.

El centro educativo, ubicado en el barrio Casavalle, es el primero del país en el que, siendo su gestión privada, los alumnos no tienen costo por asistir a clases. El objetivo es abrir las puertas al sistema educativo a quienes no tienen la posibilidad de integrarse a este por la situación socioeconómica en la que se encuentran. Los niños salen de clases superpobladas, ingresan al liceo con un gran déficit y suelen abandonar, por una conjunción de problemas. El Liceo Jubilar, a través de su modelo de educación, estimula a los estudiantes de tal forma que al día de hoy su nivel de deserción es casi nulo.

Con la donación de pupitres, a principio del año lectivo, HSBC intentó dar su aporte a esta iniciativa, potenciada por ser un modelo de educación en un barrio marginado.

En una segunda instancia, HSBC organizó una recolección de mantas y alimentos con motivo del inicio del invierno entre los funcionarios del banco. Luego, voluntarios de la entidad financiera concurrieron a la institución para entregar lo recolectado.

HSBC tiene planificado continuar el vínculo con el Liceo Jubilar y estudia nuevas acciones para llevar adelante en el futuro junto a esta institución.