Movidos por la Vida a la opinión pública.

Habiendo visto la difusión de nuevas estadísticas oficiales respecto a la aplicación de la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (Ley de Aborto) y las presiones indebidas ejercidas sobre los profesionales objetores de conciencia, se constata que:

I) Las autoridades del Ministerio de Salud Pública (MSP) omiten gravemente la difusión de las cifras del número de abortos mes a mes, que nos permitiría observar claramente la tendencia al alza del número de abortos, que pasaron de 200 en el primer mes de aplicación de la ley a un promedio de por encima de los 400 en los seis meses posteriores, lo que nos permite estimar una cantidad de abortos de 600 o más en alguno/s de esos meses.

II) Estas mismas autoridades incurren en un error y falta de evidencia al pronosticar un descenso a futuro del número de abortos practicados e ignoran que los estudios científicos más recientes muestran un comportamiento contrario en los países en los que el aborto es legal, es decir, de aumento del número de abortos.

III) Los 2550 abortos que se han practicado entre diciembre y mayo: a) o desmienten absolutamente la bandera de los 33 mil abortos clandestinos anuales que supuestamente se practicaban en Uruguay; o bien b) esta ley es ineficaz para terminar con los abortos clandestinos; o c) ambos puntos anteriores.

IV) Lejos está esta ley de ayudar a la mujer a salir adelante y ofrecerle alternativas, cuando observamos que el porcentaje de usuarias que deciden continuar con su embarazo tras la consulta ha descendido abruptamente del 20% en el primer mes de aplicación de la ley, a entre el 6 y el 10% promedialmente en los seis meses posteriores, consumando un aborto entre el 90 y 94% de las usuarias.

V) Las autoridades del MSP omiten expresarse acerca de los motivos que han llevado a las usuarias a realizarse los abortos, lo que nos frena como sociedad que quiere reducir y evitar la práctica del aborto y pensar políticas públicas de protección a la maternidad.

VI) Se continúa tergiversando la relación entre mortalidad materna y estatus legal del aborto en Uruguay, cuando a) se afirma una falsa relación de causalidad entre ambas variables (la disminución de la mortalidad materna se debe a otras variables que tienen que ver con la educación de la mujer, como los más recientes hallazgos científicos así lo muestran); b) se ignora que las principales causas de mortalidad materna se encuentran en los estados hipertensivos del embarazo y las infecciones, y no en el aborto provocado; y c) se usan números relativos en lugar de números absolutos, contrariamente a lo que cualquier experto riguroso en epidemiología lo indicaría.

VII) Se continúa violando la libertad de pensamiento, la objeción de conciencia y los derechos de los trabajadores de la salud, incluyéndose ahora un formulario para justificar su objeción y recibiendo dichos trabajadores presiones oficiales de todo tipo. Ante todo lo expuesto, Movidos por la Vida exige:

1) Transparencia, rigurosidad, honestidad y fidelidad en la presentación e interpretación de los datos, como lo indican las más sanas costumbres democráticas y republicanas de nuestro país.

2) La difusión de estadísticas mensuales y periódicas de la aplicación de la ley de aborto para la elaboración de diagnósticos inmediatos.

3) La divulgación de indicadores que muestren la evolución mes a mes –no usando promedios- y departamento por departamento –no clasificando entre Montevideo e Interior- del número de abortos, del número de usuarias que continúan con su embarazo, de su edad y sector de cobertura, para la obtención de más completas y mejores conclusiones.

4) Información sobre los motivos que han llevado a las usuarias a realizarse los abortos, para atacar dichas causas con políticas públicas eficaces y ayudar social y solidariamente a salir adelante a la mujer en situación de riesgo.

5) El más amplio respeto a la objeción de conciencia –Derecho Humano fundamental- de los trabajadores de la salud involucrados en los procedimientos de abortos, sin la necesidad de justificación alguna ni ejerciendo sobre ellos presión de ningún tipo.

Fuente Imagen: cvclavoz.com