El viernes 20 de diciembre, a las 17 horas, nuestra organización, el Plenario de Cooperativas de Viviendas de Propietarios y Conjuntos Habitacionales (COVIPRO-CH), realizará una concentración en las puertas de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV), Cerrito y Zabala, para luego marchar hasta la Torre Ejecutiva, pasando por el Ministerio de Vivienda (MVOTMA).

En la misma se entregaran cartas al Sr. Presidente de la República, Don José Mujica, al Ministro de Vivienda, Arq. Francisco Beltrame y a la Presidente de la ANV, A.S. Cristina Fynn, reclamando una inmediata solución para las deudas que mantiene nuestro sistema cooperativo.

Desde hace más de un año las negociaciones con el Ministerio de Vivienda se han interrumpido sin un motivo expreso, y el resultado es que a la fecha, buena parte del sistema de cooperativas de propietarios mantiene deudas que oscilan entre 120.000 y 240.000 dólares, sin el interés proyectado.

Adjuntamos Carta Abierta de COVIPRO-CH, difundida hace apenas una semana, que amplía información al respecto.

Las cooperativas integrantes del Plenario de Cooperativas de Viviendas de Propietarios y Conjuntos Habitacionales (COVIPRO-CH), hacemos público los siguientes reclamos, en el entendido que se han detenido todas las negociaciones con el Ministerio de Vivienda desde hace más de un año, donde realizamos una serie de propuestas, las cuales no han sido consideradas.

1- Exigimos la revisión de los saldos iniciales de todas las cooperativas cuyos saldos actuales superen el monto otorgado por concepto del préstamo para la construcción.

2- En la actualidad, esa situación es la de al menos el 90 por ciento del sistema cooperativo de propietarios que conforman el Fideicomiso 1, producto del clientelismo de décadas del BHU con empresas que usaban el sistema cooperativo para multiplicar ganancias y de una tasa de interés comercial del préstamo. A ello deberíamos agregar a las cooperativas que pertenecen a la cartera del MVOTMA y que por falta de una política clara de recupero del crédito, hoy sobrepasan largamente la deuda inicial.

3- El acuerdo 2008 firmado por nuestra organización con el MVOTMA solucionó en parte el desfasaje, llevando las cuotas a un valor similar a una tasa de interés social, aunque la misma se vería incrementada con el paso del tiempo por ser un subsidio al interés y no al capital. Es por ello que quedó establecido en el documento el compromiso de analizar los saldos iniciales, cosa que hasta hoy no ha sucedido en la dimensión pretendida. Ese estudio debía esclarecer el valor de la vivienda desde su inicio, que en la mayoría de los casos no se corresponde con el préstamo y la calidad constructiva resultante.

4- Nos encontramos hoy con un panorama desalentador: este sistema cooperativo debe el doble o más que el valor de préstamos que se otorgan para la construcción de viviendas. Es decir, casi 4.000 familias deben pagar dos veces (en valores constantes es mucho más aún) de lo que vale una vivienda. Esto se corresponde con lo expresado por varios tasadores enviados por la ANV en los últimos tiempos, estudios que no se nos permite analizar con profesionales de nuestras cooperativas puesto que esas tasaciones (en principio) son sólo un requisito del BCU.

5- Las deudas se han incrementado en más de un 40% si tomamos en cuenta el préstamo inicial. En la actualidad, parte de ella está a un 7% de interés y otra (las partidas exigibles, nombre elegante para llamar a los colgamentos) a un 2 % acumulado. Es una constante que en proyección cada cooperativista deba todavía más de 150 mil dólares, luego de una década, por lo menos, de pagos parciales o totales en la mayoría de los casos.

6- Si a ello le sumamos que en un intento de estudio de saldos iniciales realizados por la ANV con una cooperativa, confirman que la deuda hoy se incrementó más del doble por una década de no pago (pasó de 3.000 UR a más de 6.500 sin interés y quitando multas y recargos), queda claro que no existe voluntad política alguna de buscar una salida cuyo eje fundamental sea alcanzar el valor real y adecuado de las viviendas.

7- Por otra parte, la inercia de la Administración no se condice con políticas que se han llevado adelante en otras áreas del sistema de vivienda social. Incluso, se alcanzaron quitas sustanciales en Conjuntos Habitacionales considerados “cartera comercial” al igual que en Sociedades Civiles. Por algún motivo oculto existe una discriminación evidente al sistema que representamos, que no se distancia, más allá de la persona jurídica que “absorbió” el préstamo, de los criterios utilizados en las modalidades antes mencionados.

8- Es por lo expuesto que exigimos se suspenda por parte de la ANV la convocatoria a firmar el acuerdo 2008, en el entendido que, en las actuales circunstancias, lo único que logra el mismo es convalidar cifras que no pueden ni deben ser pagas. La extraña negativa al estudio profundo de saldos (de hecho termina por ser una negación aquello que esquivamos discutir) provoca el crecimiento desmedido de una deuda que desde ya se sabe impagable.

9- A lo anterior agregamos la necesidad que el Sr. Ministro de Vivienda tome cartas en el asunto. Es imprescindible hoy una resolución ministerial que deje clara las pautas para una salida consensuada a la problemática expuesta. Creemos que la misma debe plantearse 180 días para una negociación seria y permanente.

10- A su vez, estaríamos dando un paso adelante con que la actual administración firme una resolución al respecto, ya que durante estos cuatro años casi se ha negado sistemáticamente a hacerlo, incluso con propuestas de solución que salieron de ellos.

POR LA REESTRUCTURA DE TODAS LAS DEUDAS DEL SISTEMA COOPERATIVO

POR TASACIONES QUE SE ADECUEN A LA REALIDAD ECONÓMICA Y CONSTRUCTIVA

POR CUMPLIMIENTO DEL ACUERDO 2008 EN SU TOTALIDAD

Por COVIPRO-CH

 

Sergio Requel Gustavo López

Presidente Secretario