El programa que subsidia parte del costo financiero que las mipymes industriales tramiten para incorporar mejoras tecnológicas se extiende a otra institución bancaria. El objetivo –junto a otras herramientas del Gobierno- es impulsar la transformación productiva y la mayor inserción económica de este sector que constituye el 93% de las empresas del país.

El Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), a través de su Dirección Nacional de Artesanías, Pequeñas y Medianas Empresas (Dinapyme), y el Banco Santander firmaron este jueves un convenio en el marco del Programa de subsidio de tasas de interés en préstamos para la innovación tecnológica, tendiente a impulsar la transformación productiva y la mayor inserción económica de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes).

A través de esta firma, el Banco Santander se integrará al programa que subsidia parte del costo financiero de los créditos que las mipymes industriales tramiten para incorporar mejoras tecnológicas.

La suscripción del convenio se realizó en la casa central del Banco Santander y contó con la participación del ministro de Industria, Energía y Minería, Roberto Kreimerman; el director de Dinapyme, Pablo Villar; y el gerente general del Banco Santander, Juan Carlos Chomali, entre otras autoridades.

Banco Santander es el tercer banco del país que se suma al programa, luego del Banco República y el Bandes.

Herramientas

Durante el acto, el ministro Kreimerman destacó que este programa se inscribe dentro de los cuatro ejes de la estrategia productiva del MIEM: la diversificación de la producción de productos y servicios; la introducción de conocimiento aplicado y tecnología; el logro de más valor agregado y, por ende, más trabajo; y el desarrollo de la economía social y solidaria.

En estas líneas, explicó, se inserta el trabajo con las mipymes, a través de un conjunto de herramientas de importancia fundamental. Entre ellas se incluyen los beneficios impositivos y el acceso al Fondo Industrial, además del programa al que se vincula el convenio firmado entre el MIEM y el Banco Santander.

Este, en particular, tiene la relevancia de que, a través de la innovación tecnológica y la apuesta a la calidad, mejora la competitividad de las empresas, tanto en el mercado interno como en el internacional. “El único camino posible para la industria es el del conocimiento y la tecnología”, dijo el ministro.

Kreimerman destacó luego del acto que el MIEM está aportando alrededor de 2 millones de dólares para implementar este programa, y destacó que, junto a otros instrumentos (como el acceso al Fondo de Diversificación de Mercados y el descuento del Impuesto a la Renta, a través de la Ley de promoción de inversiones), conforma un “paquete” fundamental para un sector conformado por más de 130.000 mipymes, en el que reside el 60% del trabajo nacional y el 93% de las empresas del país.

El ministro también remarcó el trabajo “fructífero” realizado junto al Banco Santander en este y otros proyectos clave para la estrategia productiva del MIEM.

Por su parte, el gerente general de la institución bancaria dijo que la firma de este convenio es muy importante para lograr un acercamiento mayor al sector de las mipymes, segmento que requiere más apoyo gubernamental y social.

Chomali enfatizó que apoyar a las mipymes es un hecho democratizador, que implica oportunidades de acceso al desarrollo y dignifica la tarea de la banca. Además, agradeció la oportunidad que ofrece el Gobierno para que el Banco Santander sea parte del desarrollo del país y avance en su compromiso con la sociedad.

El programa

En octubre de 2012 se puso en marcha el Programa de subsidio de tasas de interés a las mipymes para la renovación tecnológica. A través de él se subsidia parte del costo de los créditos que las mipymes obtienen en el sistema financiero para renovación o incorporación de activos fijos que impliquen cambio o mejora tecnológica.

El programa es aplicable a todas las mipymes cuya actividad sea la producción industrial o provean servicios estratégicos para la industria. A través de él, las microempresas pueden acceder al beneficio en créditos de hasta $ 1.000.000. Los subsidios corresponden al 100% del diferencial entra la tasa de inflación del año anterior y la tasa media para microempresas en créditos mayores a un año (según el Banco Central del Uruguay). De este modo, las microempresas tienen tasas de interés iguales a la inflación. Por lo tanto -en promedio- al tomar montos del máximo para la franja, el microempresario está obteniendo un beneficio anual de aproximadamente $ 60.200.

En cuanto a las pequeñas empresas, el subsidio de tasas será aplicable a créditos de hasta $ 1.500.000 y es equivalente al 85% del diferencial de tasa de interés entre la tasa de inflación del año anterior y la tasa del BROU para préstamos amortizables para sujetos de crédito categoría 2B . El beneficio anual aproximado es de $ 35.479.

Finalmente, el subsidio de tasas para medianas empresas es aplicable a créditos de hasta $ 3.000.000 y consiste en el 70% del diferencial de tasa de interés entre la tasa de inflación del año anterior y la tasa del BROU para préstamos amortizables para sujetos de crédito categoría 2B. El beneficio anual aproximado es de $ 58.436. En todos los casos, los créditos podrán pagarse hasta en 60 meses. En créditos superiores a la cifra máxima estipulada para cada categoría, el subsidio se aplica solo hasta el tope establecido.

Las empresas deben iniciar el trámite con la obtención del Certificado Mipyme que acredite su condición y la presentación de la factura proforma del bien por el que se solicitará el crédito. El certificado se tramita en Dinapyme (Rincón 723, oficina 201), en el horario de 11.00 a 15.00. La evaluación, autorización o rechazo del financiamiento es responsabilidad exclusiva de la institución financiera. Para conocer el mecanismo completo de obtención de los subsidios, se adjuntan las bases del programa.

Más información se obtiene en el teléfono 0800 3455 int. 257 y el correo electrónico subsidiodetasas@dinapyme.miem.gub.uy.