Armando CastaingdebatEl diputado Armando Castaingdebat (Todos-Partido Nacional), hizo uso de la palabra en la media hora previa de la Cámara de Representantes, refiriéndose al tema de violencia en el fútbol, donde expresó que: “Este problema no tiene origen político y, mucho menos, puede tener una solución con color político; lo que debe haber es voluntad de los diferentes actores de la sociedad y de nosotros mismos, como actores políticos, para encontrar una solución a este tema”.

La solución para el Diputado Castaingdebat, quien viene trabajando en este tema desde el Congreso de Intendentes en la Comisión Nacional de Seguridad en el Deporte hasta ahora en la Cámara de Representantes, consta de aplicar la ley vigente por la cual se garantiza el derecho de admisión en un primer paso, luego dice: “indudablemente, esa es una etapa mucho más compleja y deberemos recurrir a fondos de financiamiento, ya que vamos a precisar dinero, considerando que necesitaremos un gran soporte tecnológico. Consideramos que el encargado de sancionar no puede estar en la órbita de la Asociación Uruguaya de Fútbol; creemos que hay un camino específico para trabajar sobre este tema y estamos seguros de que los uruguayos nos podemos poner de acuerdo en ese sentido, más allá de los colores políticos o partidarios.”

Compartimos la versión taquigráfica.

SEÑOR CASTAINGDEBAT (Armando). Señor presidente: hoy, sin alegría, nos vamos a referir a un tema sobre el que hubiéramos preferido no hablar en este ámbito, ya que nos gustaría que estuviera solucionado. Vamos a hacer referencia a lo que sucedió el fin de semana en Montevideo en ocasión de la disputa del clásico; por supuesto no vamos a hablar del resultado, ya que el resultado más dolidos nos tiene todavía.

Últimamente, nos estamos acostumbrando a que si en los espectáculos deportivos llamados de alto riesgo pasan cosas parecidas a las que sucedieron este fin de semana, sectores políticos y diferentes actores de la sociedad salen a hablar inmediatamente preocupados por el tema y, en muchos casos, hasta se proponen nuevas leyes. Lamentablemente, el paso del tiempo después nos hace olvidar y todo eso cae en saco roto; solo cuando se repite el suceso retomamos el tema.

Desde que el señor Díaz asumió como ministro del Interior y hasta que ocupamos esta banca fuimos representantes del Congreso de Intendentes en la Comisión Nacional de Seguridad en el Deporte, y hoy solo queremos comentar lo que dijimos allí, prácticamente, durante nueve años. Estamos convencidos de que este es un problema que va mucho más allá de colores partidarios, y quien le quiera poner a esto un tinte político, indudablemente, debe tener poco interés en buscar una solución al tema.

Este problema no tiene origen político y, mucho menos, puede tener una solución con color político; lo que debe haber es voluntad de los diferentes actores de la sociedad y de nosotros mismos, como actores políticos, para encontrar una solución a este tema.

No los vamos a aburrir con lo que sucedió a lo largo de los años y en diferentes lugares, ya que eso solo sirve para aquilatar la gravedad del problema, aunque también debería servir para buscar una solución de fondo y definitiva.

Podemos sacar como conclusión que quienes tuvieron voluntad para solucionar el problema, lo hicieron; en realidad, en lugares en los que parecía imposible alcanzar una solución, actualmente, a través de la televisión y de los medios, vemos que no solo se solucionó sino que el fútbol también volvió a ser un pasatiempo familiar.

Nosotros estamos convencidos de que la solución de este problema es mucho más sencilla de lo que se piensa y de que lo fundamental es tener voluntad para hallarla.

En primer lugar, creemos que con la legislación vigente alcanza para comenzar a solucionar el tema; pensamos que no es necesario seguir sancionando leyes en un país en donde abundan y no se aplican. Sin duda, debemos tratar de aplicar las leyes vigentes, quizás adecuándolas un poco.

Decíamos que la solución de este problema es sencilla porque, para nosotros, tiene dos patas fundamentales.

En primer lugar, debemos tener claro que en este país determinadas personas no pueden participar de espectáculos deportivos, porque no están adaptadas ni en condiciones de hacerlo. Creo que ese es el primer gran tema, aunque pueda haber diferentes opiniones. Se me preguntará: ¿cómo hacemos para que los inadaptados no participen de los espectáculos deportivos? Hoy vemos en la prensa que se pasan la pelota unos a otros, pero nosotros estamos convencidos de que hay que recorrer el camino necesario para que la autoridad ejerza el derecho de admisión. No vale la pena discutir lo que dice la ley; lo que debemos hacer es ponernos de acuerdo sobre quién debe ejercer el derecho de admisión a los diferentes espectáculos deportivos. En ese sentido, no admitimos otra posición porque el encargado de imponer autoridad es el que tiene que ejercer ese derecho; sin duda, no son los clubes, aunque pueden ayudar y colaborar.

Por supuesto, luego de pasada esa etapa, debemos analizar cómo se puede implementar todo esto. Indudablemente, esa es una etapa mucho más compleja y deberemos recurrir a fondos de financiamiento, ya que vamos a precisar dinero, considerando que necesitaremos un gran soporte tecnológico; en ese sentido, todos sabemos que el Ministerio del Interior ya está pidiendo máquinas de detección facial, detectores de metales, molinetes, circuitos cerrados de televisión.

Por lo tanto, quien piense que el fútbol uruguayo está en condiciones de hacer frente a todo esto, no conoce la realidad de nuestro fútbol. En realidad, algunos de los clubes uruguayos llegan a fin de mes sin poder pagar la luz y el teléfono, y creemos que el Estado debe hacer una gran inversión.

Asimismo,  indudablemente el tema es mucho más amplio, consideramos que el encargado de sancionar no puede estar en la órbita de la Asociación Uruguaya de Fútbol; creemos que hay un camino específico para trabajar sobre este tema y estamos seguros de que los uruguayos nos podemos poner de acuerdo en ese sentido, más allá de los colores políticos o partidarios.

A modo de comienzo de una discusión que no empieza hoy y que pretendemos que no termine, solicito que la versión taquigráfica de mis palabras sea enviada a la Presidencia de la República, al Ministerio del Interior, a la Asociación Uruguaya de Fútbol y a la Dirección Nacional de Deporte.

Fuente Imagen: www.lr21.com.uy