vandalismo Iglesia del Cordónpor Marcelo Márquez. Cuando todo hacía suponer que iba a predominar el sentido común, ocurrió totalmente lo contrario, predominó el menos común de los sentidos: la Coordinadora de Feminismos consideró que es una forma válida de expresión la acción de tirar bombas de pintura a una iglesia, tal como aconteció, una vez más, el pasado 8 de marzo contra la Parroquia del Cordón.

Y la justificación “patas para arriba” en un mundo en donde nos quieren cambiar los valores y llamar a lo bueno, malo, y a lo malo, bueno, provocó la reacción de condena de diversos actores: políticos, periodistas, y de la propia Institución Nacional de Derechos Humanos (INDHH), entre otros.

Otros atenuaron la situación y hasta omitieron referirse al asunto.

En su Comunicado fechado el 9 de marzo, “la Institución Nacional de Derechos Humanos y Defensoría del Pueblo (INDDHH) expresa su preocupación por el ataque del que fue objeto la fachada de la Parroquia Nuestra Señora del Carmen (Iglesia Católica) en la zona del Cordón, durante la noche de ayer. La INDDHH se ha pronunciado en anteriores oportunidades respecto a la necesaria garantía del derecho a la libertad de expresión y a la protesta pacífica. En una comunidad democrática, el ejercicio de estos derechos debe estar siempre unido al esfuerzo colectivo para generar un clima de convivencia, donde prime el respeto por la diversidad de ideas, creencias y opiniones”.

El senador Pablo Mieres (PI) opinó: “Condenable declaración de la denominada Coordinadora de Feminismos defendiendo vandalización de la Iglesia del Cordón. No representa el sentimiento de las mujeres uruguayas y, además, es una conducta violenta anti democrática. Muy malo”.

La legisladora del PN, Verónica Alonso dejó en claro que “fui a la marcha para reivindicar la igualdad y el respeto para todas las Mujeres. Vandalizar una iglesia o cualquier otra institución no las hace más feministas, las hace intolerantes. El odio de algunas no me representa”.

También lo hizo el diputado Rodrigo Goñi Reyes (PN): “Repudiamos los actos de vandalismo contra la Iglesia del Cordón. Al igual que lo hicimos el año pasado, reclamamos a la Fiscalía General de la Nación que no permita la impunidad de actos ilícitos que vulneran la Constitución, la ley y dañan la democracia”.

Su correligionario Pablo Abdala dijo: “La coordinadora de organizaciones feministas dijo que no cuestionan la vandalización de edificios, como el del BROU y la Iglesia del Cordón. ‘Son formas de expresarse’. Decir eso es grave y repudiable. No representa a las mujeres uruguayas. Está al borde de la apología del delito”.

En tanto, fiel a su estilo, Roberto Chiazzaro (FA) expresó: “El 8 M fue magnífico en todo sentido Lamentablemente siempre hay desubicados como algunos evangélicos que protestaron contra las políticas de género y los que tiraron bombas de color a la Iglesia del Cordón”.

Desde Colombia, el diputado Sebastián Sabini señaló: “Los que hablan de ‘ideología de género’ fueron a generar un hecho político, a provocar.

Miles les dieron la espalda y demostraron cómo se transforma hacia la igualdad. Salud compañeras por la lección que dieron”.

Desde el Partido Independiente, Conrado Ramos sostuvo: “Concuerdo absolutamente y fue una fiesta maravillosa. Lo que no corresponde son las declaraciones de la coordinadora respaldando la vandalización del BROU y la Iglesia del Cordón”.

“La coordinadora de feminismos critican una pancarta ‘femeninas sí feministas no’ y afirman que es ‘VIOLENCIA’. La pancarta sobre el ataque al BROU y la IGLESIA DEL CORDÓN no la condenan y no les causa rechazo. ¡¡¡AFIRMACIONES QUE ME RECUERDAN LOS 60′..70′!!! manifestó el edil suplente del PN, Víctor Hugo Del Valle.

El dirigente juvenil nacionalista por Rivera Sebastián Iramendi también dio su punto de vista: “No entiendo como se exige derechos e igualdades… si se lo pide desde la violencia o discriminación. Repudio todo tipo de violencia hacia la mujer, hacia el hombre, hacia cuadro de fútbol, iglesia, etc. Lo ocurrido en la Iglesia del Cordón es inaceptable!!!  #8M

La empresaria Selva Andreoli recordó una experiencia personal: “En esa misma iglesia del Cordón vandalizada, me protegieron cuando la caballada arremetía dando palo en una manifestación contra la intervención en la dictadura”.

Periodistas

El periodista Gerardo Sotelo fue enfático ante este insuceso: “A comienzo de los setenta enfrentábamos a las patotas de la JUP que querían repartir propaganda en la Iglesia del Cordón durante la misa. La vida me llevó por otros rumbos pero igual me indigna y decepciona que, casi cincuenta años después, siga habiendo bandas de fascistas”.

Su colega Mónica Bottero también condenó el hecho: “Este acto intolerante e irrespetuoso debería ser repudiado por cada persona uruguaya que se defina como feminista”.

El también comunicador Gonzalo Ferreira: “‏Decir que no es noticia que tiren bombas de pintura en una iglesia, un banco o que haya cantos ofensivos en una marcha porque hubo mucha más gente que lo hizo en paz, es igual a decir que no se informe un lío en la tribuna porque la mayoría vio el partido en paz”.

La periodista Gabriela Casullo señaló al respecto: “Una vergüenza! Repudio tanto las provocaciones en la marcha como las agresiones a la iglesia del Cordón”.

El comunicador Gustavo Martín señaló que “algunas mujeres que pregonan respeto, vandalizaron Iglesia del Cordón. Confunden defensa de sus derechos con odio”.

Voces eclesiásticas

“Me preocupa el odio y la tendencia a la destrucción”, comentó el P. Washington Hernández, Párroco de la Iglesia del Cordón, en Radio Carve sobre los hechos ocurridos ayer en la marcha del #8M

Asimismo, el representante católico Juan A. Verde reflexionó: “Vine porque quiero luchar por mis derechos, pero con esto no estoy de acuerdo” se escuchaba. Gracias tantísim@s que se manifestaron pacíficamente. LAMENTABLE… siempre los árboles caídos hacen más ruido. A las minorías responsables de esto MI ABSOLUTO REPUDIO! Paz? Respeto?”, se preguntó.

Miguel Pastorino, licenciado en Filosofía, y bachiller en Teología consideró: “Da pena ver tanta agresividad gratuita y es preocupante el ensañamiento que tienen con la Iglesia, justificando cualquier violencia. Y lo han hecho en varios países. No fue un caso aislado”.

Fuente Imagen: sarandi690.com.uy