La Bancada del Partido Colorado en la Junta Departamental de Canelones acusó al intendente Marcos Carámbula de «aparente desviación de poder».

Textualmente los colorados canarios expresan:

«En una aparente desviación de poder -esto sucede cuando el proceso se usa con fines ajenos para los que está establecido-, muchos funcionarios de filiación colorada son sometidos a un tratamiento despótico en clarísima violación de los principios del debido proceso, pisoteando su dignidad y desconociendo el principio de igualdad, base esencial de los DD.HH.

Cientos de citaciones a declarar ante la intendencia, ante comisiones de la junta departamental y ante los juzgados penales por temas de corte administrativo, sanciones sin fundamento, acoso y amenazas constituyen sólo un engranaje de la maquinaria represiva instaurada por la administración Carámbula. Estrategia que alcanza su mayor expresión cuando el municipio atraviesa alguna dificultad, de forma que esa cortina de humo pueda ocultar sus propias ineficiencias y las irregularidades graves cometidas por su personal de confianza. 

Un inocultable ejemplo de la discriminación, es la reciente sanción de 45 días que el intendente Carambula aplicó a un funcionario procesado con prisión por ¡Hurto Especialmente Agravado!; la misma medida que les aplica  a los funcionarios colorados cuando archivan un expediente de inasistencias u otros temas menores.

Esto es algo más complicado que un simple hecho grotesco, es otra demostración de la peligrosa y desequilibrada manera de gobernar de Carámbula y algunos de sus cercanos colaboradores».

Bancada del Partido Colorado.

Canelones, 28 de noviembre de 2008.