El Comité Central Israelita concurrió este jueves 8 de enero de 2009 a la sede central del PIT-CNT para expresar su molestia ante un reciente comunicado de la central sindical en el que repudia el accionar del Estado judío en la Franja de Gaza.

Representantes de la comunidad judía uruguaya sostienen que la posición de la central ha sido y es de apoyo a aquellos grupos que pregonan la destrucción del Estado de Israel.

El presidente de la organización,  Israel Buszkaniek, dijo que «nosotros planteamos nuestra discrepancia con la declaración del PIT-CNT porque se condena al Estado de Israel por defenderse de la agresión de Hamas y no dice nada acerca de la parte de Hamas en este conflicto. Por lo tanto, la entendimos discriminatoria. Nuestra respuesta es decir que, en este momento,  hay muchos conflictos en el mundo y cientos de miles de muertos, millones de desplazados y ni el PIT ni otras organizaciones, que se han expresado con respecto al conflicto de Gaza en este momento, condenan a otros conflictos que hay en el mundo», dijo Buszkaniek

La organización dice que el PIT-CNT se equivoca al decir que los disparos de Hamas responden al bloqueo israelí, cuando estos disparos anteceden al bloqueo en varios años.

El Comité Central Israelita sostiene que Hamas el es verdadero culpable de la catástrofe humanitaria, ya que si a través de la frontera egipcia, en lugar de armas, hubiera contrabandeado alimentos y medicinas, no habría tal problema.

Por su parte, el dirigente de la central de trabajadores, Gustavo Signorelle señaló que «nosotros lo que condenamos es la actitud desmedida del gobierno israelí ante lo que ha sido la actitud de Hamas. Hay 303 muertos, o algo así, causados por el gobierno israelí y tres israelíes causados, también, por el gobierno israelí. Entonces, es una reacción de David contra Goliat. Nos molesta profundamente que el pueblo judío, después de haber sufrido tanto como sufrió, en políticas de exterminio y demás, no haya aprendido nada a lo largo de la historia», dijo Signorelle.

El PIT-CNT decidió mantener la condena a Israel, el reclamo de un cese al fuego y la creación de un corredor humanitario que atienda las necesidades de la población civil palestina.