Un relevamiento realizado en varias mutualistas de asistencia médica arroja que desde la vigencia del decreto presidencial que prohíbe fumar en espacios públicos cerrados, los infartos de miocardio se redujeron en el orden del 19%.

Cerca de 43 mutualistas participaron aportando información y se estudiaron 6.452 casos. La metodología utilizada fue la de comparar la cantidad de infartos de miocardio post decreto con los casos constatados dos años antes a la prohibición de fumar en los espacios públicos cerrados.

El relevamiento del CIET indicó que previo al decreto hubo 3.567 ingresos a las puertas de emergencia de todo el país, mientras que después la cifra bajó a 2.885; lo cual representa una disminución del 19%.

En la franja de menores de 50 años el descenso fue de un 25% en la cantidad de ingresos. En los menores de 45 años fue de 43%; y en menores de 40 años fue del 51%.

Según el CIET, se debe a que la prohibición de fumar redujo la concentración de partículas de tabaco en los boliches y restaurantes.