El Programa Nacional de Discapacidad (PRONADIS) del MIDES, realizó el último Consejo Consultivo nacional del año, con la presencia de cien instituciones de todo el país dedicadas a la discapacidad. El director del BPS, Ariel Ferrari, comentó que en los últimos años se flexibilizaron las condiciones para otorgar prestaciones a personas discapacitadas, habiendo aumentado de 11 mil a 15 mil las ayudas especiales por invalidez.

Uruguay ratificó un convenio internacional  por el cual debe ubicar el diálogo y la participación social como un elemento sustancial en la gestión. Recordó que en 2007 se inició un proceso de diálogo nacional sobre seguridad social cuyas conclusiones fueron entregadas al Presidente Vázquez en abril del 2008 para su posterior implementación. En base a este informe a partir de febrero de este año, se concretaron varios cambios en las prestaciones, entre ellos, se bajó de 35 a 30 los años de trabajo necesarios para jubilarse y se eliminó la obligación de que un trabajador contara con seis meses de cotización previa a un accidente laboral, para poder acceder a una prestación por incapacidad. Asimismo destacó que este nuevo sistema de seguridad social ha hecho hincapié en los niños, desde antes de su nacimiento, brindándole amplios beneficios económicos y sanitarios a las embarazadas, recién nacidos, niños y adolescentes, como el incremento de las asignaciones familiares; la inclusión de 450 mil niños en el Sistema Nacional Integrado de Salud; que todos los niños cuenten con número de cédula de identidad apenas nacen y que a todos los recién nacidos se les practique un análisis de sangre que les permita detectar precozmente 20 enfermedades.

Ferrari añadió que el Sistema de Salud integra a los hijos de los trabajadores que tienen hasta 18 años y si son discapacitados, por el resto de su vida; también señaló que con la nueva flexibilización de criterios se logró disminuir las restricciones para que los padres de discapacitados que se jubilen sigan manteniendo la cobertura de sus hijos. En el caso de los discapacitados severos, se logró que ni el número de propiedades con que cuenten ni los ingresos económicos del núcleo familiar, sean decisivos al momento de otorgarles una  prestación. En general, se pasó de 11 mil a 15 mil las ayudas especiales y  se aumentaron las pensiones otorgadas por invalidez.