Compartimos la ponencia de Cruz Roja Uruguaya en el Parlamento en donde informan de sus actividades y de su propósito de ser incluidos en el régimen de donaciones especiales.

-La Subcomisión de Audiencias de la Comisión de Presupuesto integrada con Hacienda del Senado da la bienvenida a los representantes de la Cruz Roja Uruguaya, con fecha 2 de setiembre.

SEÑORA GARCÍA.- Antes que nada, quiero presentarme. Soy Nívea García Benítez de Meerhoff y desde el 25 de junio próximo pasado soy la Presidenta de Cruz Roja Uruguaya, en cuyo nombre quiero hacer llegar nuestro agradecimiento por la deferencia que han tenido los señores Senadores al recibirnos y escuchar nuestra solicitud.

Traemos una carta presentación de la Federación Internacional de la Cruz Roja, Media Luna Roja y del CICR; además, queremos exponer nuestro servicio.

En concreto, nuestra solicitud apunta a que se nos incluya en la ley de donaciones especiales para la exoneración de los tributos.

En primer lugar, voy a leer la carta que nos representa por pertenecer a un movimiento internacional. Está dirigida, quizás por error, a la señora Senadora Susana Dalmás y dice lo siguiente: “Informados de la solicitud que Cruz Roja Uruguaya está presentando al Honorable Senado del Uruguay, referente a la inclusión en el régimen de donaciones especiales, dentro del proyecto de ley relacionado con la rendición de cuentas y balance de ejecución presupuestal, del ejercicio 2010, publicado el 30 de junio de 2011, que introduce cambios en dicho régimen de donaciones, especialmente al impuesto IRAE, venimos, respetuosamente, en nombre de la Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y la Media Luna Roja, a expresar nuestro apoyo a dicha solicitud y solicitamos del Honorable Congreso, preste en sus deliberaciones, especial atención al rol auxiliar de los poderes del Estado, que por ley le corresponde a la Cruz Roja Uruguaya, el cual compromete a la Institución a prestar ayuda humanitaria complementaria en cualquier circunstancia que ello lo amerite. La Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, representa a las 186 Sociedades Nacionales de Cruz Roja y Media Luna Roja que existen en el mundo. Este rol nos permite estar muy cerca de dichas organizaciones, lo cual nos da la posibilidad de certificar la tarea que ellas realizan en todo el mundo. La red universal de Cruz Roja es única en su mandato. Sus principios han sido aceptados y respetados por todos los Estados firmantes de los Convenios de Ginebra, lo cual compromete a un trabajo mancomunado y de apoyo mutuo en beneficio de las personas que más precisen la atención humanitaria.

Cruz Roja Uruguaya, -fundada el 5 de marzo de 1897- en sus más de 114 años de servicio voluntario a su país, ha demostrado ser fiel a los principales fundamentales de la Institución. En su historia ha trabajado en forma coordinada y sistemática prestando apoyo a los Poderes del Estado Uruguayo para paliar el sufrimiento humano.

Para realizar su trabajo humanitario la Cruz Roja Uruguaya, al igual que todas las Cruces Rojas del mundo, necesita del apoyo y la solidaridad de todos los sectores de la sociedad, especialmente del Estado. Esta praxis es conocida internacionalmente y son muchas las Cruces Rojas del mundo, que gracias a un apoyo fuerte, que respeta la independencia de la Institución, pueden desarrollar una mayor tarea humanitaria.

Son estas las razones, las que nos llevan a apelar a vuestra solidaridad para que a la Cruz Roja Uruguaya se le preste todo el apoyo que se merece en su noble tarea de ayudar a las personas más necesitadas y vulnerables de su país.

Esperando que esta petición tenga una buena acogida, me despido en nombre de la Federación Internacional de Cruz Roja, agradeciendo su apoyo y reiterándole todas nuestras muestras de respeto y alta consideración.

Atentamente, Gustavo Ramírez. Representante Regional”.

También traigo los saludos del Secretario General de la Federación, Bekele Geleta.

A continuación, voy a sintetizar la carta que hicimos llegar a la señora Senadora Dalmás.  Allí se dice que las autoridades de Cruz Roja Uruguaya tienen el agrado de dirigirse a usted para presentar sus saludos a la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Senadores y solicitar la inclusión de nuestra Sociedad Nacional en el régimen de Donaciones Especiales.

La  Cruz Roja Uruguaya brinda ayuda humanitaria a los vulnerables y actúa como auxiliar de los Poderes públicos, con personería jurídica otorgada por Decreto del Poder Ejecutivo de 26 de octubre de 1897, constituida de acuerdo con los Convenios de Ginebra. Actúa en situaciones críticas, como las inundaciones, por ejemplo, en ocasión de las producidas en el año 1959 y siguientes.

También cuenta con la aprobación del Convenio de Ginebra del CICR desde el año 1897.

Dentro de las tareas que desarrolla -que vienen resumidas en la carpeta-se destaca la Escuela de Auxiliares de Enfermería Integral, con cuatro cursos y un promedio de cien egresados por año. Sus títulos son habilitados por los Ministerios de Salud Pública y de Educación y Cultura, pasando dichos recursos humanos a integrar el equipo de salud nacional con su trabajo, brindando asistencia a pacientes de la actividad pública y privada, es decir, tanto en sanatorios como en hospitales.

En la Sede Central también funciona la Escuela de Manualidades -que es muy conocida-, que brinda más de treinta cursos orientados, en su mayoría, a personas de la tercera edad, constituyendo una verdadera terapia e inserción laboral.

En nuestras policlínicas ambulatorias se atienden pacientes en forma gratuita y se hace promoción y prevención de la salud. Se realizan cursos de Primeros Auxilios -es la marca que identifica a la Cruz Roja en todo el mundo- a la población en general, a las comunidades vulnerables, a las empresas, etcétera, y se actúa ante situaciones críticas.

Es digno mencionar que a los estudiantes se les cobra una pequeña cuota y para aquellos que no tengan recursos suficientes, existe la posibilidad de la beca o media beca que es estudiada en cada caso.

No recibimos ningún financiamiento del exterior. En ocasiones la Federación o el Comité Internacional de la Cruz Roja -CICR- nos apoyan para la realización de talleres. Si bien recibimos una pequeña subvención por parte del Estado, de $ 41.000, actualmente nuestros recursos son limitados; la masa social ha disminuido, por lo tanto en el mes de mayo daremos una amnistía y realizaremos una campaña para una reincorporación adecuada de los mismos.

El costo de los insumos comprometidos en el de pago de los pocos funcionarios que tenemos en la sede central -6 funcionarios, 12 docentes, 2 limpiadoras- ha aumentado notoriamente en estos últimos años, como así también las necesidades de la población. El apoyo que brindamos permanente al MIDES se ha intensificado por lo que nos resulta difícil cumplir con dicho compromiso. Hemos elevado esta inquietud a la Federación que nos aconsejó solicitar esta entrevista.

La Presidencia actual de la Federación asumió el 25 de mayo y se ha realizado un estudio a corto plazo de nuestras necesidades. Nuestra sede está ubicada en Avenida 8 de Octubre 2990, es una casona muy vieja que necesita refacciones y no tiene capacidad suficiente.

Por estas razones, solicitamos que se nos incluya en el proyecto de ley presupuestal para el régimen de donaciones especiales como entidad beneficiaria, para poder seguir cumpliendo con nuestra misión estatutaria de ayuda humanitaria y social a la población con necesidades insatisfechas. Presentamos una carpeta en la que figuran los dos decretos, especialmente, el del Comité Internacional de la Cruz Roja, de fecha 19 de abril de 1900.

Nuestra capacitación de recursos humanos es llevada a cabo a través de la Escuela de Enfermería, de los Cursos de Primeros Auxilios, de la Escuela de Manualidades y del Servicio de Bienestar Social que funciona en nuestra sede y a través del cual entregamos ropa, víveres y artículos de higiene en general, como así también apoyamos a los damnificados por las inundaciones y viviendas siniestradas.

Asimismo, contamos con la Dirección Nacional de Voluntariado -la Directora de Voluntarios Juventud me acompaña- cuya mayor fuerza la constituye -como su nombre lo indica- el propio voluntariado que, luego de ingresar y según su vocación de servicio, se distribuye en las áreas que elige. Posteriormente, debe realizar cursos de formación básica institucional.

Existen tres clases de voluntariado: el Voluntariado General, que luego de dos años de actividad ininterrumpida pasa a integrar el padrón de voluntariado activo; el Voluntariado Juventud y el Voluntariado Social integrado por la Comisión de Damas. El voluntariado es la columna vertebral de la labor de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja en el mundo a través de 186 sociedades nacionales.

Contamos, también, con la Dirección Nacional de Difusión y Comunicación -cuya Directora nos acompaña-, a través de la cual se capacita al voluntariado en Derecho Internacional Humanitario, Principios Fundamentales, Doctrina de su fundador Henry Dunant, Emblemas y Convenios de Ginebra. Se efectúan cursos de difusión a nivel de instituciones militares, misiones de paz, escolares y organismos. Existen diferentes niveles: el curso básico de difusión de Derecho Internacional Humanitario -en el mes de octubre realizaremos un taller que se tratará de difundir ya que se nos dificulta hacerlo por los altos costos de la prensa y televisión-; el curso de instructores de Derecho Internacional Humanitario; el curso de facilitadores de comunicación y la biblioteca de documentación de Derecho Internacional Humanitario que siempre ha sido consultada por estudiantes universitarios, de instituciones militares, escolares y otros organismos. Nuestros recursos financieros provienen de la recaudación de fondos mediante el dictado de cursos de capacitación de las diferentes escuelas y Direcciones Nacionales. Los fondos con que contamos para el apoyo logístico y el pago de viáticos a docentes son limitados. Además, falta equipamiento acorde con las tecnologías modernas, no disponemos de aulas suficientes para realizar los cursos ni contamos con elementos de confort.

En cuanto a la recaudación de  cuotas sociales, ya mencioné que actualmente hay adeudos. Asimismo, puedo citar lo relativo a donaciones esporádicas, especialmente, en épocas de inundaciones. También se recaudan fondos mediante actividades benéficas. En este momento nuestro balance tiene un resultado negativo por los compromisos de pagos de sueldos, aguinaldos y aportes al Banco de Previsión Social para los seis funcionarios docentes que tenemos. A su vez, por nuestra condición de federados, pagamos anualmente un baremo obligatorio a la Federación Internacional, de 5.550 francos suizos, compromiso que para nosotros es difícil de cumplir, y hemos heredado una pequeña deuda de la administración anterior.

Como auxiliares de los poderes públicos en estos 114 años,  y en la medida de nuestras posibilidades,  siempre brindamos apoyo con las finanzas de la Cruz Roja a situaciones de emergencia y a personas sufrientes y vulnerables.

Contamos con una Sede Central y 19 Comités Departamentales, por lo que podemos decir que la Cruz Roja está representada en todos los departamentos del país.

Queremos aunar esfuerzos y voluntades para seguir trabajando en nuestra visión de futuro. Tenemos para cumplir la Estrategia 2020, que no es fácil -tal como marca la Federación- y recién terminamos de evaluar, con mucha dificultad, la Estrategia 2010. Nuestra solicitud está basada en la larga trayectoria de la Cruz Roja que, a través del tiempo, ha probado su solidaridad con la población sufriente y con organismos con los que hemos trabajado siempre en alianza estratégica.