Compartimos la columna del líder de Vamos Uruguay, Pedro Bordaberry correspondiente al domingo 10 de noviembre bajo el título “Los Desafíos de la Nueva Generación”.

“Estamos viviendo, en la vida política de nuestro país, un momento de transición, de cambio.

Se está operando la transición de las generaciones políticas uruguayas.

Llega a su fin el tiempo de generaciones que mucho han hecho por el Uruguay. A las que les tocó vivir tiempos de enfrentamientos en el país y en el mundo. Generaciones que lograron pese a eso, con grandeza y aciertos, la reconstrucción democrática del Uruguay.

Hoy estamos ante un tiempo nuevo. El de una nueva generación que asume responsabilidades y una que se va. Hay una generación que anda en sus cincuenta que empieza a competir y suplantar a otra que tiene más de setenta y pico.

Ello lleva a preguntarse cuáles son los desafíos de esta nueva generación.

A mi juicio nos toca no sólo reivindicar los derechos consagrados en la Constitución y en las leyes, sino hacerlos efectivos. Sacarlos de ser, en algunos casos, enunciados genéricos que no se plasman en la realidad a que se concreten, se respeten.

De nada sirve que se establezca que es obligatoria la educación si tenemos el índice de repetición que tenemos o una gran cantidad de jóvenes ni estudian ni trabajan.

De nada sirve legislar sobre salud si no hay ambulancias en los pueblos del interior, no hay especialistas en muchos lugares y hasta se mueren mujeres en las puertas de los hospitales por falta de ellos.

De nada sirve consagrar el derecho a la libertad si no podemos dejar nuestras casas solas por miedo a que nos roben, debemos colocar rejas y cercas o no circulamos a determinadas horas por ciertos lugares por miedo a que nos asalten.

Por ello el gran desafío de nuestra generación, la agenda prioritaria es lograr que esos derechos, que nadie discute, efectivamente sean respetados.

El Partido que está en el gobierno cumplirá diez años en él en marzo del 2015.

No pongo en duda su intención de mejorar el Uruguay. Todos la tenemos. En algunas áreas lo logró. En otras, notoriamente, hemos retrocedido.

Pero el gran enemigo que tuvo fue concentrarse en sus laberintos internos y no en los grandes temas del país. Esas contradicciones internas, tan indisimuladas últimamente, terminaron en concesiones a algunos o en inmovilismos que afectaron la calidad de nuestra educación, salud, y crecimiento. Ha afectado hasta la gestión en Montevideo.

Esas mayorías, provocaron que las grandes decisiones sobre el futuro del país quedaran atrapadas en las discusiones internas del Partido de Gobierno y que como consecuencia gran parte del Pueblo Uruguayo quede fuera de ellas.

Así la agenda en estos años fue la intención de derogar una ley ratificada dos veces por los uruguayos con su voto. Eso llevó al país a perder más de un año en discusiones para que finalmente la Justicia les dijera lo evidente: que era inconstitucional. Y para que los uruguayos les dijéramos bien fuerte que los resultados de las urnas deben respetarse SIEMPRE.

Por eso creo que no ha sido bueno ese monopolio del poder y la conducción del país de los últimos diez años. La mitad de los uruguayos, aquellos que no votamos al Partido de gobierno, hemos estado excluidos de la representación de nuestras ideas, sentimientos, propuestas y prioridades.

La agenda de temas prioritarios del país pasa por la Educación, por la Seguridad, por la Salud, por terminar con la pobreza.

No por la discusión interna de la ley de medios, de la marihuana, de quien es el Presidente de un Partido, su candidato, la amistad con la Sra. Kirchner o la derogación de la ley de Caducidad.

Por eso nuestro desafío es cambiar esto. Poner en la agenda nacional los temas de todos los uruguayos y no de la mitad del país.

Lo haremos no sólo representado a esta otra mitad, sino a todos los uruguayos. Porque el Uruguay somos todos y es solamente entre TODOS que podremos construir un mejor Uruguay.

La Democracia es no sólo votar, la Democracia es también el respeto de la mayoría por la minoría, es la limitación del poder, es diferenciar el Gobierno del Estado, el Partido del ciudadano, el Derecho de la arbitrariedad.

Darse cuenta que un gobierno debe priorizar los temas que afectan a todos los uruguayos y no a unos pocos es esencial para mejorar.

Es lo que haremos a partir de marzo del 2015”.

Fuente: www.eleccionesenuruguay.com